La tasa de natalidad de Francia cae por debajo de dos niños por mujer

PARÍS.- La tasa de natalidad de Francia descendió de la cota simbólica de dos niños por cada mujer y el país vio su menor crecimiento demográfico en una década en 2013, mostraron el martes unos datos que suponen un fuerte golpe a una de sus fortalezas económicas.

La población alcanzó los 66 millones de habitantes a uno de enero de 2014, un 0,4 por ciento más que el año previo. Es el crecimiento más débil desde 2000, mostró un censo de la oficina francesa de estadísticas INSEE.

La tasa de fertilidad bajó a 1,99 niños por cada mujer en 2013, desde 2,01 en 2012 y 2,03 en 2010. Se considera que es necesaria una tasa de 2,1 para mantener el crecimiento de la población, sin tener en cuenta la migración.

Aunque Francia sigue siendo la segunda nación más fértil de la Unión Europea por detrás de Irlanda, que tuvo una tasa de fertilidad de 2,05 en 2011, la bajada sugiere que la segunda economía de Europa puede estar perdiendo lo que ha considerado desde hace tiempo como una de sus fortalezas.

Al contrario que Alemania, cuya economía está fuertemente orientada a las exportaciones, el modelo francés ha dependido del consumo interno apoyado por un fuerte crecimiento de la población como el principal catalizador de su economía.

Las políticas de subsidios para favorecer los nacimientos han mantenido un crecimiento constante de la población en el periodo de posguerra.

Pero la caída de los nacimientos, junto al aumento de los decesos, sugiere que Francia podría converger con tasas más moderadas como la británica, de 1,98 en 2011, aunque por encima de países de fuertes caídas demográficas como Hungría y Polonia.

El paro de alrededor del 11 por ciento y unos altos impuestos golpearon las rentas de los hogares el año pasado.

Italia y Alemania - con tasas respectivas de 1,41 y 1,36 en 2011 - luchar con una bajada demográfica que se percibe que lastra a sus economías a medida que una menor población activa apoya a un creciente número de pensionistas.

Francia es el segundo país más poblado de Europa después de Alemania, cuya población de 2012 de unos 82 millones de habitantes está previsto que baje a cerca de 70 para 2050, menos que Francia y Reino Unido.