MOSCÚ.- Con un crecimiento de las inversiones extranjeras directas en un 83
por ciento, Rusia se ubicó en 2013 entre los tres primeros líderes
mundiales con economías emergentes, destacaron hoy los canales
federales.
La nación euroasiática avanzó del noveno al tercer puesto con un flujo
de inversiones de capital foráneo de 94.000 millones de dólares, según
un informe de la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y
Desarrollo (Unctad), divulgado aquí.
Rusia se colocó así por primera vez en la troika de líderes mundiales como receptor de inversiones extranjeras directas.
Uno de los factores que se señalan fue la millonaria transacción realizada entre la compañía Rosneft y la trasnacional British Petroleum, y la adquisición por la petrolera rusa de la filial TNK-BP por 57.000 millones de dólares.
Expertos del organismo mundial proyectan para el período un flujo de inversiones hacia Rusia no inferior a 2013.
Según las estadísticas, en las economías emergentes el indicador creció en un 45 por ciento, equivalente a 126.000 millones de dólares. En los países en desarrollo las inversiones extranjeras representaron un 52 por ciento, respecto al total global.
A escala mundial, éstas experimentaron un salto de 11 por ciento (1,46 billones), después de una baja de 18 puntos porcentuales en 2012.
Se destacan entre los principales centros los países del Grupo Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y el foro de Asia-Pacífico.
Rusia se colocó así por primera vez en la troika de líderes mundiales como receptor de inversiones extranjeras directas.
Uno de los factores que se señalan fue la millonaria transacción realizada entre la compañía Rosneft y la trasnacional British Petroleum, y la adquisición por la petrolera rusa de la filial TNK-BP por 57.000 millones de dólares.
Expertos del organismo mundial proyectan para el período un flujo de inversiones hacia Rusia no inferior a 2013.
Según las estadísticas, en las economías emergentes el indicador creció en un 45 por ciento, equivalente a 126.000 millones de dólares. En los países en desarrollo las inversiones extranjeras representaron un 52 por ciento, respecto al total global.
A escala mundial, éstas experimentaron un salto de 11 por ciento (1,46 billones), después de una baja de 18 puntos porcentuales en 2012.
Se destacan entre los principales centros los países del Grupo Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y el foro de Asia-Pacífico.
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