domingo, 16 de febrero de 2014

Passos Coelho apela al consenso con la oposición para mejorar la imagen exterior de Portugal

LISBOA.- El primer ministro portugués, el conservador Pedro Passos Coelho, apeló hoy al consenso con los partidos de la oposición para mejorar la percepción del país en el exterior a pocos meses del fin del programa del rescate.

En un acto institucional en Castelo Branco, en el centro del país, el jefe del Ejecutivo defendió un "entendimiento conjunto" con los partidos de izquierdas a pesar de los "muchos" desacuerdos que les separan.
"Estoy convencido de que la percepción exterior que podría existir sobre Portugal sería mucho mejor", insistió el también líder del Partido Social Demócrata (PSD, centro-derecha).
Passos Coelho consideró que ese acercamiento ayudaría "muchísimo" al país a la hora de garantizar su credibilidad exterior al mismo tiempo que mejoraría la opinión de los portugueses sobre el sistema político.
Con el Partido Socialista (PS) a la cabeza en las encuestas y la proximidad de las elecciones europeas, la batalla en el Parlamento luso ha subido de tono en las últimas semanas con crudas acusaciones de los grupos de izquierdas contra las medidas de austeridad del Gobierno luso.
El secretario general de los socialistas, António José Seguro, acusó esta semana a Passos Coelho de crear "fábulas" sobre un milagro económico en Portugal a tenor de los últimos indicadores positivos.
Por su parte, el líder del Partido Comunista de Portugal (PCP), Jerónimo de Sousa, acusó este sábado al Gobierno de practicar una política de "rapiña" a favor de los grupos financieros y económicos del país.
Entre acusaciones, el Gobierno luso encara la recta final del programa del rescate concedido en 2011 por la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI) con la vista puesta en la búsqueda de apoyos exteriores y de ganarse la confianza de los mercados.
El Ejecutivo prepara su estrategia para volver a financiarse de manera autónoma a partir de junio, cuando tiene previsto agotar los fondos del préstamo internacional de 78.000 millones de euros.
Además de convencer a los inversores de su solvencia, el equipo de Passos Coelho sopesa la disponibilidad de los socios europeos para conceder un programa cautelar que actúe como una red de seguridad a la hora de recurrir a la venta de su deuda en los mercados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario