LISBOA/PARÍS.- El Banco Central de Portugal mejoró hoy sus previsiones económicas
para la nación europea al considerar que crecerá este año 1,2 por
ciento, frente al pronóstico anterior de 0,8 puntos porcentuales.
En su Boletín de Primavera el organismo consideró que el 2013 cerró con
una recesión de 1,3 por ciento, frente al 1,4 estimado en diciembre.
Prevé, además, que el Producto Interno Bruto (PIB) luso mantendrá una línea ascendente en 2015 y 2016, con un crecimiento de 1,4 y 1,7 por ciento, respectivamente, períodos en que se elevará la demanda interna y se estabilizarán las exportaciones.
Aun cuando el organismo pronostica un aumento gradual de la tasa de crecimiento, señaló que la economía del país se mantendrá por debajo de la cota alcanza en el 2008, previo al inicio de la crisis financiera.
En cuanto a las exportaciones espera que para 2016 ocupen el 45 por ciento del PIB, frente a los 32 puntos porcentuales que representaban antes de la crisis.
La economía lusa acumula tres ejercicios consecutivos de recesión.
Desde 2011 Lisboa se encuentra bajo la asistencia financiera de la Unión Europea y del Fondo Monetario Internacional (FMI), que le prestaron 78 mil millones de euros para garantizar su solvencia financiera, a cambio de implementar severas medidas de austeridad con un fuerte y negativo impacto social.
En noviembre de 2013 el primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, anunció que su país pretende poner fin en la primavera del 2014 al programa de rescate y mantenerse por sus propios medios.
Fuerte alza del desempleo durante febrero en Francia
La tasa de desempleo en Francia registró un fuerte crecimiento en febrero con 31 mil 500 nuevos casos de personas sin ningún tipo de ocupación, según informaciones difundidas hoy por el Ministerio de Trabajo.
Las estadísticas confirman el fracaso de la promesa hecha por el presidente François Hollande hace más de un año de revertir la tendencia creciente de este problema, que afecta ahora a cerca de tres millones 350.000 franceses en edad laboral.
Si a los desocupados totales se les suman quienes sólo tienen un trabajo a tiempo parcial o con salarios reducidos, la suma llega a 4,9 millones en el territorio metropolitano, es decir el área continental más la isla de Córcega.
Al agregarse los departamentos y territorios de ultramar, el número se eleva a 5,2 millones, algo nunca antes visto en el país galo.
El incremento del paro durante el pasado mes es tres veces y medio superior al de enero y cumple el pronóstico de varias entidades, entre ellas la Comisión Europea, de un agravamiento del fenómeno antes de conseguir la estabilización, quizás en el tercer trimestre.
Recientemente el Observatorio Francés de Coyunturas Económicas advirtió que el escaso crecimiento de la economía, de 0,2 puntos en 2013 y estimado en 0,9 para este año, es incapaz de generar una cifra suficiente de puestos de trabajo.
Prevé, además, que el Producto Interno Bruto (PIB) luso mantendrá una línea ascendente en 2015 y 2016, con un crecimiento de 1,4 y 1,7 por ciento, respectivamente, períodos en que se elevará la demanda interna y se estabilizarán las exportaciones.
Aun cuando el organismo pronostica un aumento gradual de la tasa de crecimiento, señaló que la economía del país se mantendrá por debajo de la cota alcanza en el 2008, previo al inicio de la crisis financiera.
En cuanto a las exportaciones espera que para 2016 ocupen el 45 por ciento del PIB, frente a los 32 puntos porcentuales que representaban antes de la crisis.
La economía lusa acumula tres ejercicios consecutivos de recesión.
Desde 2011 Lisboa se encuentra bajo la asistencia financiera de la Unión Europea y del Fondo Monetario Internacional (FMI), que le prestaron 78 mil millones de euros para garantizar su solvencia financiera, a cambio de implementar severas medidas de austeridad con un fuerte y negativo impacto social.
En noviembre de 2013 el primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, anunció que su país pretende poner fin en la primavera del 2014 al programa de rescate y mantenerse por sus propios medios.
Fuerte alza del desempleo durante febrero en Francia
La tasa de desempleo en Francia registró un fuerte crecimiento en febrero con 31 mil 500 nuevos casos de personas sin ningún tipo de ocupación, según informaciones difundidas hoy por el Ministerio de Trabajo.
Las estadísticas confirman el fracaso de la promesa hecha por el presidente François Hollande hace más de un año de revertir la tendencia creciente de este problema, que afecta ahora a cerca de tres millones 350.000 franceses en edad laboral.
Si a los desocupados totales se les suman quienes sólo tienen un trabajo a tiempo parcial o con salarios reducidos, la suma llega a 4,9 millones en el territorio metropolitano, es decir el área continental más la isla de Córcega.
Al agregarse los departamentos y territorios de ultramar, el número se eleva a 5,2 millones, algo nunca antes visto en el país galo.
El incremento del paro durante el pasado mes es tres veces y medio superior al de enero y cumple el pronóstico de varias entidades, entre ellas la Comisión Europea, de un agravamiento del fenómeno antes de conseguir la estabilización, quizás en el tercer trimestre.
Recientemente el Observatorio Francés de Coyunturas Económicas advirtió que el escaso crecimiento de la economía, de 0,2 puntos en 2013 y estimado en 0,9 para este año, es incapaz de generar una cifra suficiente de puestos de trabajo.
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