BRUSELAS.- El elevado desempleo y la pobreza persisten en la Unión Europea (UE),
males que agravan el panorama del grupo, mostró hoy un informe de la
Comisión Europea.
La situación social en los 28 miembros muestra pocos signos de mejora
hasta ahora, con perjuicios más evidentes al entorno laboral de hombres y
jóvenes, remarcó el estudio.
Según la entidad, la reciente recuperación económica no ha sido capaz de crear puestos de trabajo y de hace prever un descenso de los niveles de pobreza.
El comisario europeo de Empleo, Asuntos Sociales e Inclusión, László Andor, afirmó en un comunicado que la economía ha vuelto al crecimiento a un ritmo lento, pero la situación de muchos hogares y personas todavía no mejora.
"Las desigualdades han aumentado y existe el riesgo de que la frágil recuperación actual no mejore la situación de muchos grupos con bajos ingresos", recalcó.
Cifras divulgadas reflejan que el empleo en la UE registró las primeras señales de estabilización en 2013, con un crecimiento del 0,1 por ciento en la segunda mitad del año.
No obstante, los datos del tercer y cuarto trimestres muestran que en un número cada vez mayor de países el crecimiento no se vio acompañado de la creación de plazas.
En tal sentido preocupa que los ingresos de los hogares se están quedando atrás con respecto a la subida del Producto Interno Bruto y el hecho de que cada vez hay más personas que recurren a sus ahorros y al endeudamiento para cubrir los gastos cotidianos.
La desocupación sigue en niveles récord, con cerca de 26 millones de parados (el 10,8 por ciento de la población activa) y hay un aumento del empleo temporal y a tiempo parcial.
Asimismo, la población en riesgo de pobreza y exclusión social trepó en un tercio de los países de la UE y se observa un fuerte incremento de ese mal especialmente en Grecia.
Según la entidad, la reciente recuperación económica no ha sido capaz de crear puestos de trabajo y de hace prever un descenso de los niveles de pobreza.
El comisario europeo de Empleo, Asuntos Sociales e Inclusión, László Andor, afirmó en un comunicado que la economía ha vuelto al crecimiento a un ritmo lento, pero la situación de muchos hogares y personas todavía no mejora.
"Las desigualdades han aumentado y existe el riesgo de que la frágil recuperación actual no mejore la situación de muchos grupos con bajos ingresos", recalcó.
Cifras divulgadas reflejan que el empleo en la UE registró las primeras señales de estabilización en 2013, con un crecimiento del 0,1 por ciento en la segunda mitad del año.
No obstante, los datos del tercer y cuarto trimestres muestran que en un número cada vez mayor de países el crecimiento no se vio acompañado de la creación de plazas.
En tal sentido preocupa que los ingresos de los hogares se están quedando atrás con respecto a la subida del Producto Interno Bruto y el hecho de que cada vez hay más personas que recurren a sus ahorros y al endeudamiento para cubrir los gastos cotidianos.
La desocupación sigue en niveles récord, con cerca de 26 millones de parados (el 10,8 por ciento de la población activa) y hay un aumento del empleo temporal y a tiempo parcial.
Asimismo, la población en riesgo de pobreza y exclusión social trepó en un tercio de los países de la UE y se observa un fuerte incremento de ese mal especialmente en Grecia.
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