miércoles, 2 de abril de 2014

La izquierda antiausteridad gana terreno en el Gobierno francés


PARÍS.- Un feroz crítico de la austeridad presupuestaria ha sido nombrado el miércoles ministro de Economía de Francia en un renovado gabinete repleto de estridentes personalidades, incluida Segolene Royal, la ex compañera sentimental del presidente francés, Francois Hollande.

Hollande ha encargado al nuevo gabinete frenar el declive económico de Francia tras 22 meses en el poder en el que su popularidad ha tocado mínimos y ha llevado a los socialistas a una dura derrota en las elecciones locales de este fin de semana ante los conservadores y la extrema derecha.
Mientras que su primer mandato fue criticado por su política con los barrios, el nuevo Gobierno del primer ministro Manuel Valls, conocido por sus duros discursos, incluye un papel más importante para el progresista Arnaud Montebourg, conocido por sus ataques a las grandes empresas y a la Comisión Europea, que se hace cargo de una reforzada cartera de Economía e Industria.
Montebourg, que ha acusado al Ejecutivo de la Unión Europea de estrangular la recuperación económica con las políticas de austeridad, ha sido ascendido sólo dos días después de que Hollande sugiriera que Paris podría pedir más tiempo a Bruselas para ajustar sus cuentas públicas.
Royal, que anunció su ruptura con Hollande tras su fallido intento por acceder a la presidencia en 2007, vuelve a la primera línea política como ministra de energía. Sin embargo, la oposición conservadora cargó contra Montebourg, que fue ministro de industria en 2011 y calificó a las políticas de la canciller alemana Angela Merkel de "peligrosas y suicidas".
"Veo que el señor Montebourg ha sido ascendido y se hará cargo de la política económica", declaró Jean-Francois Cope, líder del UMP después que se conociera el nuevo gabinete.
"Él será el que irá a Europa a discutir sobre nuestra política económica, en particular con los alemanes, a los que ha insultado sin rubor en los últimos dos años", afirmó.
La Comisión Europea ya ha dado a Francia dos años, hasta 2015, más para cumplir con su objetivo de déficit del 3 por ciento del PIB -- una meta que queda todavía lejos después del anuncio esta semana de que 2013 se cerró con un déficit del 4,3 por ciento del PIB.
Hollande dijo que los esfuerzos de Francia para estimular el crecimiento, especialmente con los recortes de impuestos para los que menos ganan, deberían ser tenidos en cuenta por Bruselas.
Jeroen Dijsselbloem, presidente de los ministros de finanzas de la zona euro, respondió insistiendo en que Francia sabía que debía cumplir sus promesas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario