CIUDAD DE PANAMÁ.- El Banco Nacional de Panamá (BNP) y la Caja de Ahorros se acogieron
hoy al Foreign Account Tax Compliance Act (FATCA), una ley
extraterritorial de Estados Unidos, que obliga a facilitar información
de clientes al gobierno en Washington.
La Ley de Cumplimiento Fiscal de las Cuentas en el Extranjero, nombre
del Fatca en español, es una legislación aprobada en 2010 por Estados
Unidos pero su ejecución ha tenido muchos problemas por el rechazo
generalizado en el mundo.
La legislación afecta las relaciones de los bancos nacionales con personas estadounidenses en cualquier país. "Personas estadounidenses" es una categoría de cliente que da Fatca a usuarios con algún tipo de vinculación legal o jurídica con Estados Unidos y deban tributar al Servicio de Rentas Internas (IRS) del Departamento del Tesoro, incluso sin haber estado allí.
Con ello el secretario bancario se hace trizas y es el caso del BNP y la Caja a los cuales el Consejo de Gabinete autorizó inscribirse como Participante Considerado en Cumplimiento (DCFFI, por sus siglas en inglés) ante el IRS.
De no adherirse al Fatca, cualquier banco será sujeto de multas del 30 por ciento de los pagos de origen estadounidense a las instituciones bancarias, financieras, etc, y sus clientes retenidos.
El costo de implementar el Fatca, que es muy alto pues hay un cambio radical de sistema, modelaje, papelería, es asumido por las instituciones de cada país, en este caso, el Estado panameño.
La Autoridad Nacional de Ingresos Públicos y el IRS negocian un Acuerdo Intergubernamental para definir su implementación.
La banca panameña se inclinó por el denominado Modelo 1 para informar los datos del cliente al gobierno el cual los transmitirá a Estados Unidos, y de esa manera se evita una dependencia directa del banco al IRS.
El único consuelo que queda es que se puedan tener acceso de forma recíproca a información en poder de bancos estadounidenses.
La legislación afecta las relaciones de los bancos nacionales con personas estadounidenses en cualquier país. "Personas estadounidenses" es una categoría de cliente que da Fatca a usuarios con algún tipo de vinculación legal o jurídica con Estados Unidos y deban tributar al Servicio de Rentas Internas (IRS) del Departamento del Tesoro, incluso sin haber estado allí.
Con ello el secretario bancario se hace trizas y es el caso del BNP y la Caja a los cuales el Consejo de Gabinete autorizó inscribirse como Participante Considerado en Cumplimiento (DCFFI, por sus siglas en inglés) ante el IRS.
De no adherirse al Fatca, cualquier banco será sujeto de multas del 30 por ciento de los pagos de origen estadounidense a las instituciones bancarias, financieras, etc, y sus clientes retenidos.
El costo de implementar el Fatca, que es muy alto pues hay un cambio radical de sistema, modelaje, papelería, es asumido por las instituciones de cada país, en este caso, el Estado panameño.
La Autoridad Nacional de Ingresos Públicos y el IRS negocian un Acuerdo Intergubernamental para definir su implementación.
La banca panameña se inclinó por el denominado Modelo 1 para informar los datos del cliente al gobierno el cual los transmitirá a Estados Unidos, y de esa manera se evita una dependencia directa del banco al IRS.
El único consuelo que queda es que se puedan tener acceso de forma recíproca a información en poder de bancos estadounidenses.
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