viernes, 25 de abril de 2014

El TJ de la Unión Europea se pronunciará el día 30 sobre recurso de Londres contra la Tasa Tobin

BRUSELAS.- El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) se pronunciará el próximo miércoles sobre el recurso presentado por el Reino Unido contra la decisión que permitirá a once países europeos poner en marcha una tasa a las transacciones financieras, la conocida como Tasa Tobin.

La sentencia está prevista para el 30 de abril, confirmó la portavoz de la Corte con sede en Luxemburgo, Amaranta Amador, quien explicó que el dictamen no irá precedido por las conclusiones de un abogado general del Tribunal, tal y como sucede en la mayoría de los casos.
Este procedimiento acortado es cada vez más común, explicó la portavoz, con el objetivo de acelerar los procesos, y está previsto para aquellos casos en los que "el asunto no plantea ninguna cuestión de derecho nueva", según se establece en el estatuto del TJUE.
El Tribunal se pronunciará sobre la petición de Reino Unido de que se anule la decisión del Consejo Europeo en la que se autorizó a once Estados miembros, entre ellos España, a iniciar un procedimiento conocido como cooperación reforzada, con el objetivo de poner en marcha una tasa a las transacciones financieras.
La decisión fue tomada en 2012, tras constatar que no era posible alcanzar la unanimidad necesaria entre todos los países de la Unión Europea (UE) para establecer un gravamen de este tipo a nivel comunitario.
El Reino Unido presentó un recurso ante el TJUE al considerar que la decisión tendrá efectos extraterritoriales y que la Tasa Tobin, junto con otros impuestos, llevará a que los países que no participan en la misma incurran en costes económicos.
Los países que pretenden introducir este gravamen -España, Francia, Alemania, Bélgica, Austria, Eslovenia, Portugal, Grecia, Eslovaquia, Italia y Estonia- continúan trabajando en su diseño para cerrar varias cuestiones que aún siguen pendientes, según un documento interno del Consejo de la UE.
El informe, que resume las discusiones del Grupo de Trabajo de Alto Nivel en cuestiones Fiscales celebradas el pasado 14 de abril, servirá de base a un documento que será estudiado en el Comité de Representantes Permanentes de la UE (COREPER) el 30 de abril, con el objetivo de que llegue a la mesa de los ministros de Finanzas de la UE en el Ecofin del 6 de mayo.
El titular español de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, afirmó en la reunión informal del Ecofin celebrada a principios de mes en Atenas que los once socios habían alcanzado un principio de acuerdo sobre la tasa, aunque después la Comisión Europea (CE) dijo que quedaba "mucho trabajo" para alcanzar un consenso.
De Guindos explicó entonces que la idea es implantar la tasa a partir de 2015 de forma gradual, empezando solo por las acciones, tanto en el mercado de contado como de derivados y que esperaba que lo que calificó de principio de acuerdo se cristalizase en un consenso político en la próxima reunión del Ecofin.
El citado documento indica que los países todavía están explorando diferentes vías para poner en marcha la tasa de manera paulatina y varias opciones respecto a su aplicación territorial y el alcance de la misma.
"Se reconoció la necesidad de continuar el trabajo para proveer información detallada y cuantificada sobre los ingresos anticipados de cada una de las diferentes opciones", indica el documento, en el que los socios reconocen también que se necesita más discusiones sobre "otros asuntos varios".
Además, aquellos países que deseen aplicar este gravamen a otros productos que no se incluyan desde el principio entre los imponibles "podrán hacerlo", según el papel.
Existe un consenso para "continuar trabajando en la aplicación progresiva de la tasa, con el objetivo de ganar experiencia con el nuevo marco armonizado, y notablemente en lo que se refiere al impacto económico, antes de que se amplíe su alcance".
El documento indica que podría plantearse que estos trabajos se centren en la aplicación de la Tasa Tobin, en un principio, a las "acciones y derivados".
El ministro español también indicó en su momento que cree que en la discusión sobre si gravar el principio de emisión o de residencia, se optará por la primera opción, aunque se podría tener en cuenta el segundo en algunos casos específicos en países que no tienen emisores importantes.

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