lunes, 21 de abril de 2014

Mauritania quiere fomentar su propio sector pesquero

NUAKCHOT.- - Mauritania quiere desarrollar su propio sector pesquero, todavía incipiente, y sacar así mejor partido a sus 754 kilómetros de costa atlántica que cuentan entre las más ricas del continente africano y de las que hasta ahora se beneficiaban básicamente los españoles.

El gobierno ha comenzado este mes de abril a dar pruebas de su determinación al inaugurar un astillero en Nuadibú (extremo norte del país) y un puerto de pesca artesanal en la capital, Nuakchot, pero persiste un problema mayor: la falta de una industria de transformación de productos de pescado en el país.
Esta es la razón principal, según Hademine uld Ethmane, responsable de la Federación Nacional de Pesca (FNP), de que el sector, que da empleo a 36.000 personas, solo aporte un 12 % al PIB del país, muy por debajo de la otra gran riqueza natural de Mauritania, como es el hierro (25 % del PIB).
Ethmane lamenta que el Gobierno haya perdido mucho tiempo y dinero en infraestructuras y acuerdos con pesquerías extranjeras que no han cambiado la realidad de que los productos pesqueros mauritanos se exportan en estado bruto "sin ningún valor añadido".
El profesional se refiere principalmente al acuerdo de pesca entre Mauritania y la Unión Europea, aprobado el pasado 8 de octubre de 2013 por el Parlamento Europeo por una duración de dos años, que da licencias a 65 barcos (casi todos españoles) y supone para Mauritania una importante contrapartida de 113 millones de euros.
El acuerdo con la UE es más restrictivo que el anterior, ya que ha suprimido las licencias a los cefalopoderos europeos (eran 32) para impulsar así el sector mauritano en la especie en que sus aguas son precisamente más ricas: el pulpo, según explica Abdellahi uld Mohamed el Moktar, director de la pesca industrial en Mauritania.
Según las cifras del presidente de pescas artesanales, marinos y capitanes de pesca artesanal en Mauritania, Haroune uld Ismail, la pesca de pulpo es la única fuente de ingresos para más del 90 % de los pescadores artesanales mauritanos.
Otra medida introducida por Mauritania para ayudar a la formación de una mano de obra "especializada" ha sido la que estipula que el 60 % del personal de cada barco europeo que faene en las aguas mauritanas tiene que ser compuesto de marinos de este país, a lo que se añade la obligación de desembarco para los productos demersales y transbordo de especies de pequeños pelágicos.
Esta última cláusula es la que justifica la extensión el pasado 7 de abril del Puerto Autónomo de Nuadibú (principal del país), financiado por España con un importe de 20 millones de euros, e inaugurado por el presidente mauritano Mohamed uld Abdel Aziz.
El presidente mauritano inauguró también un astillero financiado por el Estado con un coste global de 7,2 millones de euros y la ampliación de un embarcadero artesanal en Nuadibú, que será financiado por un apoyo de Japón con una financiación de 7,2 millones de euros, y que tendrá una capacidad de recepción de 3.000 embarcaciones en lugar de 700 en la actualidad.
Asimismo, Abdel Aziz durante su visita a la capital económica Nuadibú, calificada por la oposición como una "precampaña" de las elecciones presidenciales previstas en junio, inauguró un amplio proyecto pesquero con la sociedad china Poly-Hondone Pelagic Fishery Co.
Este proyecto entra en el marco de un acuerdo firmado en junio de 2010 por una duración de 25 años que consiste en la realización de un complejo industrial que abarca una fábrica de transformación, un complejo frigorífico, dos unidades de tratamiento de productos de pesca, una fábrica de hielo, una unidad de fabricación de harina de pescado y un taller de fabricación de canoas de pesca artesanales.
El coste de este proyecto, que aún no se ha puesto en marcha, se estima en 100 millones de dólares (unos 72 millones de euros) y prevé la creación de 2.463 de empleos permanentes, según Abdellahi uld Mohamed el Moktar.
Por otra parte, el presidente mauritano inauguró el pasado miércoles el segundo puerto artesanal situado a 55 kilómetros al noroeste de Nuakchot y financiado por el Estado con un coste de 36 millones de euros. Este proyecto tendrá una capacidad de recepción de 300 pequeñas y medianas embarcaciones.
"Es verdad que asistimos a nueva dinámica a todos los niveles para desarrollar el sector pesquero en nuestro país, pero el eslabón que siempre falta es la ausencia de industria conservera" lamentó Hademine uld Ethmane.
Ethmane se preguntó por qué los negociadores mauritanos no habían exigido cláusulas sobre la creación de fábricas de transformación de pescado en el país a la hora de negociar la renovación del acuerdo pesquero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario