PARÍS.- El Gobierno francés ha aprobado un decreto que
le permite bloquear las adquisiciones extranjeras de empresas francesas
dedicadas a sectores estratégicos como la energía, el agua, los
transportes, las telecomunicaciones y los sectores relacionados con la
salud.
De esta forma, el Gobierno podrá intervenir en las condiciones de
adquisición de una parte de Alstom por parte del grupo alemán Siemens o
el norteamericano General Electric.
A partir de hoy, puesto que el decreto se ha publicado este
jueves, cualquier adquisición requerirá la aprobación del ministro de
Economía francés, cargo que actualmente ocupa Arnaud Montebourg.
El propio Montebourg ha explicado que, con esta reforma, Francia
contará con un marco legal claro, eficiente y comparable al de otras
economías abiertas dentro y fuera de Europa. Asimismo, ha asegurado que
la medida se aplicará de forma selectiva y proporcionada.
Sobre la eventual adquisición de Alstom, Montebourg ha repetido en
varias ocasiones que cualquier solución para la empresas tiene que
favorecer los intereses franceses.
General Electric (GE) presentó una oferta en firme de 12.350
millones que el consejo de administración de la compañía gala se ha
comprometido a estudiar. Por su parte, Siemens aún tiene que presentar
su oferta concreta, opción que también valorará Alstom.
El presidente de Francia, François Hollande, recibió el lunes 28
de abril a una delegación de Siemens como al presidente y consejero
delegado de General Electric (GE), Jeff Immelt, para tratar el futuro de
la compañía gala después de que la empresa americana anunciara su
intención de presentar una oferta por ella.
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