FRANCFORT.- El Banco Central Europeo (BCE) prepara nuevas medidas en materia de
política monetaria que serán debatidas en su reunión de junio, informó
hoy Yves Mersch, miembro del Consejo de Gobierno de la institución.
"Estamos trabajando intensamente para expandir nuestros instrumentos
independientemente dentro de nuestro orden y hacer que nuestras acciones
sean lo más efectivas posible", declaró en un panel de discusión
durante una conferencia.
Mersch apuntó que existen varias posibilidades, algunas más fáciles de implementar que otras. Lo que sucederá exactamente es una decisión que será adoptada en el siguiente encuentro del Consejo, añadió.
El presidente del BCE, Mario Draghi, subrayó en una reciente reunión de política monetaria que está dispuesto a implementar acciones el próximo mes con el propósito de impulsar la economía de la zona euro si las previsiones actualizadas de inflación así lo recomiendan.
La entidad decidió la semana pasada mantener invariable su principal tasa de interés en el mínimo histórico de 0,25 por ciento, pese a los peligros de deflación, que según algunos expertos, acechan al grupo.
Cálculos recientes de la Comisión Europea apuntan que el crecimiento de los precios en la Eurozona será más lento que lo previsto este año y el próximo, en parte debido a un euro más fuerte y a una débil recuperación.
La inflación anual al consumidor se ralentizará en 2014 a 0,8 por ciento desde el 1,3 en 2013, permaneciendo por debajo del objetivo del BCE, de cerca de dos por ciento.
En 2015, añadió la Comisión, el medidor se ubicará en 1,2 puntos.
Analistas advierten sobre las persistentes dificultades laborales y los riesgos de deflación en el bloque de la moneda común, un fenómeno nocivo para el dinamismo de una economía porque aplaza las decisiones de compra -con la expectativa de que los precios sigan bajando- y desalienta por ello las inversiones.
El BCE continúa apostando por la política de dinero barato al mantener en un mínimo histórico su principal tasa de interés ante la incertidumbre en la Eurozona.
Mersch apuntó que existen varias posibilidades, algunas más fáciles de implementar que otras. Lo que sucederá exactamente es una decisión que será adoptada en el siguiente encuentro del Consejo, añadió.
El presidente del BCE, Mario Draghi, subrayó en una reciente reunión de política monetaria que está dispuesto a implementar acciones el próximo mes con el propósito de impulsar la economía de la zona euro si las previsiones actualizadas de inflación así lo recomiendan.
La entidad decidió la semana pasada mantener invariable su principal tasa de interés en el mínimo histórico de 0,25 por ciento, pese a los peligros de deflación, que según algunos expertos, acechan al grupo.
Cálculos recientes de la Comisión Europea apuntan que el crecimiento de los precios en la Eurozona será más lento que lo previsto este año y el próximo, en parte debido a un euro más fuerte y a una débil recuperación.
La inflación anual al consumidor se ralentizará en 2014 a 0,8 por ciento desde el 1,3 en 2013, permaneciendo por debajo del objetivo del BCE, de cerca de dos por ciento.
En 2015, añadió la Comisión, el medidor se ubicará en 1,2 puntos.
Analistas advierten sobre las persistentes dificultades laborales y los riesgos de deflación en el bloque de la moneda común, un fenómeno nocivo para el dinamismo de una economía porque aplaza las decisiones de compra -con la expectativa de que los precios sigan bajando- y desalienta por ello las inversiones.
El BCE continúa apostando por la política de dinero barato al mantener en un mínimo histórico su principal tasa de interés ante la incertidumbre en la Eurozona.
No hay comentarios:
Publicar un comentario