PARÍS.- La Asamblea Nacional de Francia aprobó hoy el presupuesto rectificativo presentado por el Gobierno para este año, donde se prevé el recorte del gasto público por 1.600 millones de euros.Durante un prolongado debate hasta las primeras horas de este jueves, los diputados decidieron eliminar una partida de reserva de 635 millones de euros, destinados a enfrentar cualquier situación de emergencia en los próximos meses.
Además se reducirán los gastos previstos en diversas entidades públicas, por un monto de 965 millones de euros.
El grupo de parlamentarios del Frente de Izquierda presentó una enmienda para anular este paquete de ajuste y abandonar las políticas de austeridad aplicadas por el gobierno, pero la iniciativa fue rechazada por el plenario.
Las medidas forman parte de un programa elaborado por el primer ministro Manuel Valls, el cual consiste en disminuir los egresos del Estado en 50.000 millones de euros hasta el 2017.
Ese plan permitiría equilibrar las finanzas públicas y reducir el déficit por debajo del tres por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), como lo exigen los tratados europeos firmados y ratificados en 2012.
También se busca financiar por ese medio el Pacto de Responsabilidad que otorgará al sector privado privilegios fiscales por 30.000 millones de euros a cambio de crear nuevas fuentes de trabajo e invertir más en el país.
Recientemente la vicepresidenta de la Comisión de Economía y Control Presupuestario de la cámara baja, Valérie Rabault, advirtió que ese proyecto tendrá un impacto negativo de 0,7 puntos en el crecimiento del PIB y destruirá un cuarto de millón de empleos.
Rabault insistió en la necesidad de equilibrar las medidas de crecimiento con el plan de recorte de gastos, para no hipotecar el futuro de la economía francesa.
La víspera el Instituto Nacional de Estadísticas y Estudios Económicos (Insee) advirtió que el alza del PIB este año será menor en tres décimas de punto de lo proyectado por el ejecutivo.
Según el ministerio de Economía, a finales de 2014 Francia tendrá un crecimiento de uno por ciento, pero el Insee desestimó esa previsión y la situó en 0,7.
Esto impedirá cumplir la promesa de revertir la tendencia creciente del paro, que en la actualidad afecta a más de tres millones 364.000 personas en edad laboral.
Los economistas señalan que para comenzar a crear nuevos empleos el PIB debe crecer de manera sostenida en 1,5 puntos, una cifra aún bastante lejos de alcanzarse.
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