LONDRES.- La agencia de calificación crediticia Fitch
ha mantenido el 'rating' de Italia en 'BBB+', según ha explicado,
porque, a pesar de que la economía del país está en una caída
continuada", la agenda de reformas del Gobierno de Matteo Renzi podría
tener "un impacto positivo".
Fitch ha indicado que el PIB se aproxima a niveles del año 2000 y,
de acuerdo con sus previsiones, podría contraerse un o,2 por ciento
este año, aunque en 2015 crecería un 0,6 por ciento, mientras que la
tasa de desempleo se mantendrá por encima del 12 por ciento en 2016.
También ha señalado que "el crecimiento general de la deuda
pública ha sido excepcionalmente alto", un 128 por ciento en 2013,
comparado con el nivel medio de la categoría 'BBB', un 40 por ciento.
Fitch prevé que en 2015 este indicar se dispare hasta el 134 por ciento y
que seguirá por encima del 120 por ciento hasta 2022.
"Esto implica una década de limitada flexibilidad fiscal para
responder a posibles golpes adversos", ha advertido, señalando que "una
vuelta al crecimiento del PIB y al superávit presupuestario serán las
claves para reducir" la deuda pública.
No obstante, ha recordado que "la solvencia de Italia está apoyada
por una larga, sana y diversificada economía y por moderados niveles de
deuda en el sector privado, así como por un sistema de pensiones
sostenible".
Asimismo, ha valorado que "el Gobierno del primer ministro Matteo
Renzi está haciendo progresos con la agenda de reformas estructurales y
fiscales, que, de implementarse exitosamente, podría tener un impacto
positivo en el crecimiento a medio plazo".
Por otro lado, Fitch ha decidido actualizar la perspectiva de
Chipre de estable a positiva, al tiempo que ha ratificado su 'rating' en
'B-' porque "la gestión de las finanzas públicas sigue sobrepasando
materialmente" las expectativas de la agencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario