MOSCÚ.- La prolongada debilidad del rublo frente al dólar y el euro hace
cundir el pánico en el mercado bursátil ruso e infló los ánimos de
pesimismo en la ciudadanía, a la par de una creciente demanda de las
divisas.
Contra todo pronóstico, el dólar transgredió este viernes la
barrera psicológica de su paridad con la moneda local, al rebasar los 48
rublos y trepar hasta 48,64 en su cotización en la Bolsa Interbancaria
Moscovita.
Igualmente, el euro se elevó metafóricamente al espacio astral para colocarse en la raya de los 60,27 rublos al cambio.
Entre los analistas existe la convicción de que las recientes modificaciones de la política del Banco Central de Rusia, más que la baja en los precios del petróleo, tienen una fuerte influencia en las turbulencias del mercado financiero, que rayan en el típico escenario de caos bursátil.
Desde inicios de año a la fecha, la moneda estadounidense se apreció en un 40,2 por ciento frente al rublo, mientras la comunitaria encareció en 26,3 puntos porcentuales.
El principal ente emisor (BC) decretó el jueves una reducción de las intervenciones en divisas (inyecciones a la bolsa) hasta el límite de los 350 millones de dólares diarios. Instantáneamente, el euro ganó dos rublos y tres kopeks y el dólar 1.82, al cambio respecto a la moneda local.
Según el boletín de la Bolsa Moscovita, al cierre de las operaciones del viernes quedó atrás una de las semanas más difíciles para el rublo en los últimos años, matizada por una "salvaje y voraz volatilidad" que lanzó incluso al dólar y al euro a cotizaciones impensadas de hasta 48,65 y 60,27 rublos, respectivamente.
Hoy el corredor se mueve en el diapasón de los 47-47.88 para la moneda estadounidense y de 58.2-59.32 para el euro.
El ministro ruso de Desarrollo Económico, Alexéi Uliukaev, declaró en Pekín que se espera un giro hacia el fortalecimiento del rublo en una perspectiva a corto plazo.
Consideró que el rublo transitó por una cotización fuerte, un proceso que denominó el precio de equilibrio, por el cual "el rublo sufrió ciertamente una sobreventa", por lo cual cabe esperarse un movimiento a la inversa en corto plazo, subrayó el titular en torno a uno de los temas que más gravita sobre la economía rusa y los bolsillos del ciudadano común ante la espiral inflacionaria.
Según la publicación especializada Finmarket, sobre la moneda local persiste la presión geopolítica ante los temores de un déficit de liquidez de las divisas (dólar y euro) a causa de las sanciones impuestas a Rusia por Occidente, lo cual acrecienta su demanda, en particular, en el sector de los viajeros al exterior.
No se descarta, sin embargo, que el rublo sea objeto de un ataque especulador bien planeado para cundir pánico e inflar los ánimos de incertidumbre en torno a la economía rusa.
En un comunicado ayer, el Banco Central advirtió que no se requería de una devaluación ulterior de la moneda local para equilibrar la balanza de pagos.
Indicó que el agitado ambiente alrededor del rublo en los últimos días podría originar riesgos para la estabilidad financiera del país, y aclaró que a fin de evitar ese dañino escenario podría ejecutar intervenciones adicionales en el mercado de divisas, en cualquier momento.
Significa que a pese haber fijado una cuota máxima para las intervenciones -de hasta 350 millones de dólares diarios en la bolsa- el ente emisor se adjudica el derecho de sobrepasar ese guarismo en caso de riesgos.
La semana anterior, el Banco Central de Rusia incrementó a 9,5 por ciento (de 7,0 desde marzo de este año) la tasa principal de interés, en una acción hacia la libre fluctuación del rublo, sin que pudiera evitar los ataques especulativos contra la moneda local.
De tal manera, que los continuos vaivenes y sobresaltos en el mercado bursátil hacen imposible trazar una futura tendencia en la curva del rublo a corto plazo, por ello ni los más avezados expertos se atreven a esbozar una proyección absoluta.
Finmarket llama la atención de que el mercado ruso de divisas está bajo las manos de especuladores y serán ellos quienes dicten la tendencia.
Para el 17 de este mes, se espera una operación de emisión del Banco Central que podría o no tener trascendencia para el mercado bursátil y la dinámica del rublo.
En general, también la primera vicepresidenta del ente emisor Ksenia Yudaeva confía en que el rublo se fortalecerá hacia fines de año, según declaró.
Igualmente, el euro se elevó metafóricamente al espacio astral para colocarse en la raya de los 60,27 rublos al cambio.
Entre los analistas existe la convicción de que las recientes modificaciones de la política del Banco Central de Rusia, más que la baja en los precios del petróleo, tienen una fuerte influencia en las turbulencias del mercado financiero, que rayan en el típico escenario de caos bursátil.
Desde inicios de año a la fecha, la moneda estadounidense se apreció en un 40,2 por ciento frente al rublo, mientras la comunitaria encareció en 26,3 puntos porcentuales.
El principal ente emisor (BC) decretó el jueves una reducción de las intervenciones en divisas (inyecciones a la bolsa) hasta el límite de los 350 millones de dólares diarios. Instantáneamente, el euro ganó dos rublos y tres kopeks y el dólar 1.82, al cambio respecto a la moneda local.
Según el boletín de la Bolsa Moscovita, al cierre de las operaciones del viernes quedó atrás una de las semanas más difíciles para el rublo en los últimos años, matizada por una "salvaje y voraz volatilidad" que lanzó incluso al dólar y al euro a cotizaciones impensadas de hasta 48,65 y 60,27 rublos, respectivamente.
Hoy el corredor se mueve en el diapasón de los 47-47.88 para la moneda estadounidense y de 58.2-59.32 para el euro.
El ministro ruso de Desarrollo Económico, Alexéi Uliukaev, declaró en Pekín que se espera un giro hacia el fortalecimiento del rublo en una perspectiva a corto plazo.
Consideró que el rublo transitó por una cotización fuerte, un proceso que denominó el precio de equilibrio, por el cual "el rublo sufrió ciertamente una sobreventa", por lo cual cabe esperarse un movimiento a la inversa en corto plazo, subrayó el titular en torno a uno de los temas que más gravita sobre la economía rusa y los bolsillos del ciudadano común ante la espiral inflacionaria.
Según la publicación especializada Finmarket, sobre la moneda local persiste la presión geopolítica ante los temores de un déficit de liquidez de las divisas (dólar y euro) a causa de las sanciones impuestas a Rusia por Occidente, lo cual acrecienta su demanda, en particular, en el sector de los viajeros al exterior.
No se descarta, sin embargo, que el rublo sea objeto de un ataque especulador bien planeado para cundir pánico e inflar los ánimos de incertidumbre en torno a la economía rusa.
En un comunicado ayer, el Banco Central advirtió que no se requería de una devaluación ulterior de la moneda local para equilibrar la balanza de pagos.
Indicó que el agitado ambiente alrededor del rublo en los últimos días podría originar riesgos para la estabilidad financiera del país, y aclaró que a fin de evitar ese dañino escenario podría ejecutar intervenciones adicionales en el mercado de divisas, en cualquier momento.
Significa que a pese haber fijado una cuota máxima para las intervenciones -de hasta 350 millones de dólares diarios en la bolsa- el ente emisor se adjudica el derecho de sobrepasar ese guarismo en caso de riesgos.
La semana anterior, el Banco Central de Rusia incrementó a 9,5 por ciento (de 7,0 desde marzo de este año) la tasa principal de interés, en una acción hacia la libre fluctuación del rublo, sin que pudiera evitar los ataques especulativos contra la moneda local.
De tal manera, que los continuos vaivenes y sobresaltos en el mercado bursátil hacen imposible trazar una futura tendencia en la curva del rublo a corto plazo, por ello ni los más avezados expertos se atreven a esbozar una proyección absoluta.
Finmarket llama la atención de que el mercado ruso de divisas está bajo las manos de especuladores y serán ellos quienes dicten la tendencia.
Para el 17 de este mes, se espera una operación de emisión del Banco Central que podría o no tener trascendencia para el mercado bursátil y la dinámica del rublo.
En general, también la primera vicepresidenta del ente emisor Ksenia Yudaeva confía en que el rublo se fortalecerá hacia fines de año, según declaró.
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