PARÍS.- La OCDE ha indicado que la recuperación económica de Estados Unidos puede fortalecerse mediante reformas claves, ya que esta continuará siendo lenta a menos que se emprendan reformas encaminadas a impulsar el crecimiento, según un informe remitido por la organización.
Aunque admite que la recuperación estadounidense es "más fuerte que
en la mayoría de los países de la organización", la OCDE afirma que
podría ser impulsada mediante nuevas reformas impositivas, de educación,
formación, inmigración y condiciones laborales, ya que mejorarían las
condiciones económicas de las familias de clase media.
Así, pese a admitir que la recuperación se ha extendido en un amplio
abanico de sectores, la mayoría de los bancos han vuelto a ser
saludables, los precios de las viviendas crecen y el desempleo cae, el
secretario general de la OCDE, Angel Gurría, ha indicado que "el actual
no es un caso de recuperación normal para EE UU, ya que el ritmo de
crecimiento, desde una perspectiva histórica, es lento".
"Es necesario implementar medidas decididas, deben ser reformas que
impulsen la economía y la hagan más inclusiva y verde. Con respecto a
este tema, felicitó al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, por
"el reciente anuncio de medidas para recortar las emisiones de CO2".
Según el informe elaborado por la OCDE, el mercado de trabajo todavía
no ha vuelto a la normalidad. Así, el desempleo ha caído rápidamente,
pero hay muchos desempleados desanimados que ya no buscan trabajo y
muchos trabajadores a tiempo parcial que querrían trabajar más horas.
Así, encontrar un trabajo sigue siendo un reto, especialmente para
los desempleados de larga duración. El documento anima a que haya una
mayor coperación entre el Gobierno y empresarios para acabar con estas
dificultades.
De este modo, sería clave una nueva estrategia de negocios que mejore
las habilidades de los trabajadores para incrementar la productividad,
lo cual lleva, frecuentemente, a un incremento de los beneficios.
En cualquier caso, el informe de la OCDE señala ciertos riesgos en la
recuperación, como una debilidad renovada del mercado de viviendas, las
turbulencias del mercado financiero y un posible debilitamiento del
crecimiento de la productividad.
Asimismo, sugiere que la salida de las políticas monetarias no
convencionales debe hacerse de manera gradual, a medida que la economía
se acerca al pleno empleo y al objetivo de inflación de la Reserva
Federal del 2%.
Del mismo modo, el documento subraya que la desigualdad en el país es
alta, ya que la clase media y baja han estado luchando con un mercado
de trabajo cambiante y con los altos costes de la educación y la
sanidad.
La OCDE reconoce que este es un tema difícil de mejorar y elogia las
reformas adoptadas recientemente o que están siendo consideradas, como
la reforma sanitaria, los cambios en educación y la maternidad pagada.
Asimismo, se congratula por el "renacimiento energético de EEU U",
fomentado por el 'fracking' que ha ayudado a crear empleo y a convertir
el país en el mayor productor mundial de gas natural, además de reducir
la emisión de gases de efecto invernadero.
Finalmente, la OCDE reconoce que hay varias dificultades
medioambientales y sanitarias ligadas a esta nueva tecnología, pero
recuerda que ninguna energía renovable ha proporcionado un crecimiento
parecido. Así, recomienda introducir un precio adecuado a los gases de
efecto invernadero y apoyar la innovación que produzca ahorro
energético.