BRUSELAS.- El acuerdo comercial que están negociaciando la Unión Europea (UE) y Estados Unidos, que concluyeron esta semana una sexta ronda de negociaciones, sigue levantando críticas por la falta de transparencia en que se llevan a cabo los contactos.
"Tuvimos intensas discusiones" y "muy técnicas", pero "son necesarias
para que se puedan tomar decisiones políticas más adelante", explicó el
jefe de la delegación de negociadores europea, el español Ignacio García Bercero,
en una conferencia de prensa tras cinco días de negociaciones.
"Muchas cosas cambiaron desde que iniciamos estas negociaciones" en
julio de 2013, ya que "discutimos ahora sobre textos precisos", subrayó
su contraparte estadounidense, Dan Mullaney.
Durante la conferencia de prensa se llevó a cabo una manifestación
delante de la sede de la Comisión Europea, en la que participaron
algunas decenas de personas que se oponen al tratado .
Uno de los temas más controvertidos es el de los tribunales
arbitrales, que son jurisdicciones de derecho privado competentes para
dirimir conflictos entre los Estados y las multinacionales.
La Comisión lanzó una consulta pública para saber si este tema debía
ser incluido en las negociaciones. Esta acaba de terminar y generó "casi
150.000 respuestas", cuyo análisis terminará en noviembre,
indicó García Bercero. Será "la próxima Comisión la que evaluará estos
resultados".
El comisario europeo de Comercio , Karel De Gucht, había indicado ante el Parlamento Europeo que sería la próxima Comisión la que
decidirá sobre este tema y prometió "inyectar más transparencia en el
proceso" de negociación.
"No haremos público el texto preciso de negociación", reconoció
Mullaney quien insistió sobre el trabajo de información realizado cara al
público. "Reconocemos que podemos hacerlo mejor", agregó.
"Nuestra puerta sigue abierta para los que quieren expresar un punto de vista", subrayó García Bercero.
La inquietud, a ambos lados del Atlántico, es el temor a una erosión
de las normas sociales, medioambientales y de salud. "Nuestro primer
principio es que nada se hará para rebajar nuestros estándares",
insistió García Bercero.
La UE espera cerrar las negociaciones el año próximo, antes de que
termine el segundo mandato del presidente estadounidense Barack Obama.