PEKÍN.- Los precios de las casas nuevas en
China cayeron significativamente en diciembre por cuarto mes
consecutivo, pese a que aumentaron los volúmenes de ventas de fin de
año, en un sombrío presagio para el dato de crecimiento del cuarto
trimestre de 2014 que será publicado la próxima semana.
El desalentador dato del domingo ensombrecía cifras
económicas del martes, cuando analistas estiman que la Oficina Nacional
de Estadísticas anunciará que la expansión se desaceleró un 7,2 por
ciento, su tasa más débil desde el momento más álgido de la crisis
financiera.
La caída de los precios de las casas probablemente
mantengan la presión sobre los consejeros del banco central para que
eviten una ralentización más acentuada este año.
La esperada desaceleración del crecimiento en la
segunda mayor economía del mundo desde un 7,3 por ciento en el trimestre
de julio a septiembre significará que la cifra anual incumplirá con la
meta del Gobierno de un 7,5 por ciento y marcará la expansión más débil
en 24 años.
Si el dato del producto interno bruto (PIB) resulta
peor a lo esperado, algunos analistas afirman que el Banco Popular de
China (PBOC, por su sigla en inglés) podría reducir aún más las tasas de
interés o disminuir el encaje bancario para todos los bancos.
Un recorte del encaje bancario daría a los bancos una
mayor capacidad para otorgar préstamos, pero muchos observadores del
mercado cuestionan si estarían dispuestos a elevar su exposición en la
medida en que se deterioran las condiciones económicas.
Dado que las inversiones inmobiliarias responden por
cerca de un 15 por ciento del crecimiento del PIB de China, un declive
de un 9 por ciento en nuevo espacio en construcción en los primeros 11
meses de 2014 podría tener fuertes repercusiones.
"Prevemos que el crecimiento del PIB de China se
desacelere más en 2015, a 6,8 por ciento, y que la baja actual en
propiedades lleve a más debilidad en la construcción y en la producción
industrial, y en inversiones relacionadas", escribió en una nota el
economista para China en UBS Tao Wang.
El mercado inmobiliario chino ha sufrido de caídas de
precios y altos inventarios en los últimos meses, lo que ha reducido la
demanda en 40 sectores económicos desde acero a cemento y muebles.
El dato de la Oficina Nacional de Estadísticas mostró
que los precios de las casas nuevas en diciembre bajaron en promedio un
4,3 por ciento interanual en 68 de las 70 mayores ciudades que
monitoriza.
Pero en algo así como un éxito en las políticas de
Pekín, los volúmenes de ventas de propiedades en 70 grandes ciudades
anotó en diciembre el mayor nivel visto en 2014, con un avance de casi
un 9 por ciento respecto a noviembre, según datos de la Oficina Nacional
de Estadísticas.
El analista senior de la Oficina Nacional de
Estadísticas, Liu Jianwei, dijo que recientes concesiones en políticas,
incluyendo la reducción oficial de tasas de interés de noviembre y
préstamos más baratos, habían impulsado el interés por compras de
viviendas en la medida en que las inmobiliarias apuntalaban las ventas
de fin de año.
No obstante, para el economista senior del Centro de
Intercambios Económicos Internacionales de China, Wang Jun, el panorama
es desalentador.
"Las inmobiliarias no están tan confiadas en el
panorama del mercado inmobiliario. Es por eso que el crecimiento de las
inversiones en propiedades siguió cayendo en los últimos meses",
explicó.
"Sin duda que la desaceleración del mercado inmobiliario seguirá arrastrando a la economía en general en 2015", agregó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario