DAVOS.- La economía y el cambio climático centraron los análisis en el 45º Foro
de Davos, que concluyó hoy tras cuatro días de sesiones orientadas a
restablecer la confianza mundial en esas esferas.
El Foro Económico Mundial (WEF por sus siglas en inglés), llamado
comúnmente de Davos, se efectúa cada año en esa localidad suiza y en
esta ocasión reúne a más de 2.500 representantes de 140 países.
Los actuales bajos precios del petróleo han ocupado notable atención, pues se trata de una materia prima universal cuya situación interesa tanto a naciones ricas industrializadas como a las subdesarrolladas.
Sobre este aspecto, representantes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), en particular de Arabia Saudita, ratificaron su apego a no modificar la actual cuota extractiva del hidrocarburo.
Sin embargo, otros productores de crudo, entre ellos Oman, criticaron al bloque y abogaron porque éste haga lo contrario en pos del aumento de los precios.
La situación económica de América Latina es debatida mediante exposiciones de epresentantes de Brasil, México, Colombia, Perú y Panamá y de la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Alicia Bárcena, entre otros.
Asimismo, la grave crisis económica europea, en particular de la Eurozona y la agudización de las tensiones en Grecia relacionadas con su deuda pública, ha sido un tema tratado con detenimiento.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, el premio Nobel mexicano Mario Molina y otros oradores alertaron sobre los graves riegos económicos y de todo tipo que entraña el cambio climático.
No están ausentes en la cita intervenciones referentes a conflictos en Irak y Libia, entre otros, así como las conversaciones relacionadas con el programa nuclear iraní.
Según analistas, el Foro de Davos reúne a los ricos del planeta principalmente, entre ellos líderes de corporaciones, magnates, empresarios y banqueros, cuya visión de los problemas dista mucho de la de los sectores populares.
Los actuales bajos precios del petróleo han ocupado notable atención, pues se trata de una materia prima universal cuya situación interesa tanto a naciones ricas industrializadas como a las subdesarrolladas.
Sobre este aspecto, representantes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), en particular de Arabia Saudita, ratificaron su apego a no modificar la actual cuota extractiva del hidrocarburo.
Sin embargo, otros productores de crudo, entre ellos Oman, criticaron al bloque y abogaron porque éste haga lo contrario en pos del aumento de los precios.
La situación económica de América Latina es debatida mediante exposiciones de epresentantes de Brasil, México, Colombia, Perú y Panamá y de la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Alicia Bárcena, entre otros.
Asimismo, la grave crisis económica europea, en particular de la Eurozona y la agudización de las tensiones en Grecia relacionadas con su deuda pública, ha sido un tema tratado con detenimiento.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, el premio Nobel mexicano Mario Molina y otros oradores alertaron sobre los graves riegos económicos y de todo tipo que entraña el cambio climático.
No están ausentes en la cita intervenciones referentes a conflictos en Irak y Libia, entre otros, así como las conversaciones relacionadas con el programa nuclear iraní.
Según analistas, el Foro de Davos reúne a los ricos del planeta principalmente, entre ellos líderes de corporaciones, magnates, empresarios y banqueros, cuya visión de los problemas dista mucho de la de los sectores populares.
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