PANAMÁ.- Unas 600.000 personas laboran hoy en el mercado informal de Panamá,
la mayoría de ellos jóvenes menores de 24 años, señala un informe
publicado por la revista Martes Financiero.
Según el texto, este grupo está integrado por domésticas, trabajadores
independientes y otros que laboran en alguna empresa que no les reconoce
sus derechos, por lo que carecen de prestaciones y cobertura de
seguridad social.
Expertos coinciden en que tal situación se debe a que algunas personas prefieren la informalidad porque ven ella una oportunidad temporal para generar sus propias ganancias, y otras porque no encuentran empleo por la vía legal.
Al respecto, el especialista en inserción laboral y autogestión sostenible René Quevedo dijo que la informalidad se genera como consecuencia de la rigidez de los patrones de inserción laboral en el sector formal de la economía, particularmente en materia educativa.
Debemos considerar que el 95 por ciento de los jóvenes humildes que culminan la Secundaria comienza a trabajar sin estar preparado, por lo que deben recurrir a la informalidad, precisó.
A esto se suma, el hecho de que muchos se resisten a tener jefes, adoran los horarios flexibles y consideran que son insuficientes los beneficios del Estado a cambio del cobro de impuestos, aseguró Quevedo.
El estudio también reveló que la mayoría, incluso de los trabajadores formales, se financian con los recursos que generan a diario y con ahorros personales o familiares.
El pasado año la Asamblea Nacional aprobó cuatros leyes encaminadas a promover el acceso a los créditos, desarrollar la microfinanzas y generar incentivos a la formalidad empresarial; sin embargo, la burocracia resulta hoy un freno, afirman especialistas.
De acuerdo con el reporte de Martes Financiero, la fuerza trabajadora en América Latina está compuesta por 275 millones personas, de las cuales 130 millones engrosan el mercado informal.
Expertos coinciden en que tal situación se debe a que algunas personas prefieren la informalidad porque ven ella una oportunidad temporal para generar sus propias ganancias, y otras porque no encuentran empleo por la vía legal.
Al respecto, el especialista en inserción laboral y autogestión sostenible René Quevedo dijo que la informalidad se genera como consecuencia de la rigidez de los patrones de inserción laboral en el sector formal de la economía, particularmente en materia educativa.
Debemos considerar que el 95 por ciento de los jóvenes humildes que culminan la Secundaria comienza a trabajar sin estar preparado, por lo que deben recurrir a la informalidad, precisó.
A esto se suma, el hecho de que muchos se resisten a tener jefes, adoran los horarios flexibles y consideran que son insuficientes los beneficios del Estado a cambio del cobro de impuestos, aseguró Quevedo.
El estudio también reveló que la mayoría, incluso de los trabajadores formales, se financian con los recursos que generan a diario y con ahorros personales o familiares.
El pasado año la Asamblea Nacional aprobó cuatros leyes encaminadas a promover el acceso a los créditos, desarrollar la microfinanzas y generar incentivos a la formalidad empresarial; sin embargo, la burocracia resulta hoy un freno, afirman especialistas.
De acuerdo con el reporte de Martes Financiero, la fuerza trabajadora en América Latina está compuesta por 275 millones personas, de las cuales 130 millones engrosan el mercado informal.
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