NUEVA YORK.- Los precios del petróleo sufrieron hoy otro fuerte derrumbe de un
dos por ciento ante el incierto escenario internacional, marcado por la
crisis migratoria en Europa y otras tensiones y conflictos en Medio
Oriente.
El petróleo Brent para noviembre cayó 68 centavos, o 1,4 por ciento, a
48,24 dólares por barril, luego de subir hasta un tres por ciento.
De acuerdo con los analistas los futuros del crudo Brent se dirigen a un descenso de más de 11 por ciento este mes, con lo que el declive a la fecha alcanza un 16 por ciento.
En tanto, el crudo estadunidense West Texas Intermediate (WTI) para entregas en octubre, también retrocedió 96 centavos de dólar (2.06 por ciento) y se cotizó en 45.72 dólares por barril.
Para noviembre este tipo de carburante en Estados Unidos perdió 1,17 dólares, a 45,79 dólares por barril.
Para los operadores la volatilidad ha repuntado esta semana, ya que el panorama para el crudo es opacado por datos que apuntaron a la posibilidad de que el mercado se estabiliza tras perder más de la mitad de su valor en un año, y ante la persistencia del mayor superávit global en los últimos tiempos.
Medios especializados confirmaron que existe evidencia de que la producción de crudo de esquisto en Estados Unidos ya siente el impacto de la caída del petróleo a cerca a mínimos de seis años, lo que ha llevado a la Agencia Internacional de Energía a emitir pronósticos más alentadores sobre el equilibrio del mercado el próximo año.
De acuerdo con los analistas los futuros del crudo Brent se dirigen a un descenso de más de 11 por ciento este mes, con lo que el declive a la fecha alcanza un 16 por ciento.
En tanto, el crudo estadunidense West Texas Intermediate (WTI) para entregas en octubre, también retrocedió 96 centavos de dólar (2.06 por ciento) y se cotizó en 45.72 dólares por barril.
Para noviembre este tipo de carburante en Estados Unidos perdió 1,17 dólares, a 45,79 dólares por barril.
Para los operadores la volatilidad ha repuntado esta semana, ya que el panorama para el crudo es opacado por datos que apuntaron a la posibilidad de que el mercado se estabiliza tras perder más de la mitad de su valor en un año, y ante la persistencia del mayor superávit global en los últimos tiempos.
Medios especializados confirmaron que existe evidencia de que la producción de crudo de esquisto en Estados Unidos ya siente el impacto de la caída del petróleo a cerca a mínimos de seis años, lo que ha llevado a la Agencia Internacional de Energía a emitir pronósticos más alentadores sobre el equilibrio del mercado el próximo año.
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