BRASILIA.- Diputados brasileños cuestionaron hoy la credibilidad de la agencia
calificadora Standard & Poor's, que rebajó la nota de crédito al
valor de "bono basura", con lo cual el país perdió su grado de
inversión.
Esa agencia asumió una postura precipitada e inequívoca en la
evaluación realizada sobre el escenario económico de Brasil, y repitió
la misma conducta engañosa desempeñada durante la crisis financiera
internacional, afirmó el legislador Enio Verri, del Partido de los
Trabajadores (PT).
Verri rememoró el papel desastroso de la Standard & Poor's antes y después de la crisis iniciada en 2008, lo cual motivo que aceptara pagar mil millones de dólares a las autoridades de Estados Unidos para sellar un litigio tras ser acusada de subir intencionadamente la calificación de grupos inversores hipotecarios.
"Cuando una agencia hace un análisis de este tipo, debe considerar también el escenario futuro a partir de las medidas que se implementan en el momento actual. A pesar de que los números no son favorables ahora, el gobierno impulsa acciones para enfrentar" esta situación, aseveró.
Esto no fue considerado, alertó el diputado, quien es además profesor licenciado del Departamento de Economía de la Universidad Estadual de Maringá, en Paraná.
Su colega Ságuas Moraes, también del PT, corroboró lo expuesto por Verri y señaló que dicha evaluación, anunciada anoche, no puede servir para medir la situación financiera de Brasil.
Tras indicar que el planeta atraviesa por una crisis mundial, dijo que los indicadores muestran a Brasil entre los menos afectados por este adverso escenario, lo cual no fue tomado en cuenta por la Standard & Poor's.
La agencia calificadora redujo la nota de crédito y ubicó a la nación entre los territorios con un estatuto de inversión especulativa, después que el gobierno admitiera el deterioro del panorama fiscal para 2016 con una proyección de déficit de más de ocho mil millones de dólares.
Dicha entidad, que mantuvo en julio pasado el grado de inversión para la economía brasileña, pero cambió la perspectiva de estable a negativa, fue imputada por haber defraudado a inversores antes de la burbuja inmobiliaria desatada en 2008 en Estados Unidos.
El Departamento estadounidense de Justicia presentó en 2013 una acusación contra la calificadora por presentar inadecuadamente como seguros los valores de alto riesgo relacionados con hipotecas de baja calidad.
Verri rememoró el papel desastroso de la Standard & Poor's antes y después de la crisis iniciada en 2008, lo cual motivo que aceptara pagar mil millones de dólares a las autoridades de Estados Unidos para sellar un litigio tras ser acusada de subir intencionadamente la calificación de grupos inversores hipotecarios.
"Cuando una agencia hace un análisis de este tipo, debe considerar también el escenario futuro a partir de las medidas que se implementan en el momento actual. A pesar de que los números no son favorables ahora, el gobierno impulsa acciones para enfrentar" esta situación, aseveró.
Esto no fue considerado, alertó el diputado, quien es además profesor licenciado del Departamento de Economía de la Universidad Estadual de Maringá, en Paraná.
Su colega Ságuas Moraes, también del PT, corroboró lo expuesto por Verri y señaló que dicha evaluación, anunciada anoche, no puede servir para medir la situación financiera de Brasil.
Tras indicar que el planeta atraviesa por una crisis mundial, dijo que los indicadores muestran a Brasil entre los menos afectados por este adverso escenario, lo cual no fue tomado en cuenta por la Standard & Poor's.
La agencia calificadora redujo la nota de crédito y ubicó a la nación entre los territorios con un estatuto de inversión especulativa, después que el gobierno admitiera el deterioro del panorama fiscal para 2016 con una proyección de déficit de más de ocho mil millones de dólares.
Dicha entidad, que mantuvo en julio pasado el grado de inversión para la economía brasileña, pero cambió la perspectiva de estable a negativa, fue imputada por haber defraudado a inversores antes de la burbuja inmobiliaria desatada en 2008 en Estados Unidos.
El Departamento estadounidense de Justicia presentó en 2013 una acusación contra la calificadora por presentar inadecuadamente como seguros los valores de alto riesgo relacionados con hipotecas de baja calidad.
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