ESTRASBURGO.- El secretario
general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico
(OCDE), Ángel Gurría, animó hoy los Estados miembros a que "transformen
la crisis migratoria actual en un resultado económico positivo".
En su comparecencia ante la Asamblea Parlamentaria del Consejo de
Europa, señaló que los inmigrantes son una "baza" y pidió que se
facilite el aprendizaje del idioma del país de destino.
Así "los nuevos flujos migratorios se integrarían más fácilmente",
dijo Gurría, según el cual se necesitan "progresos en la integración de
los refugiados" y "diálogo con los países de origen y tránsito".
El máximo responsable de la OCDE advirtió en referencia al
envejecimiento de la población europea que "necesitamos que los
inmigrantes compensen la tendencia demográfica", lo que en su opinión
supone un nuevo beneficio de su actual afluencia.
Gurría felicitó en concreto a Marruecos por los "esfuerzos
estructurales para mejorar" la situación creada por los flujos
migratorios "a pesar de los vecinos difíciles", cuyos ciudadanos
utilizan ese país como lugar de tránsito.
En la intervención, que no se circunscribió a la crisis migratoria,
expresó su preocupación por el aumento de la desigualdad y aseguró que
"los países más ricos ganan diez veces más que los más pobres".
"El legado de la crisis económica permanece", manifestó Gurría, que
recordó que hay 42 millones de parados en los países de la OCDE, 10
millones más que antes de la crisis. Ante ello, incidió en la necesidad
de "formar y capacitar" a la población activa.
En materia medioambiental, señaló que "estamos actuando como
esquizofrénicos, porque financiamos los combustibles fósiles y queremos
reducir las emisiones".
Para Gurría, 2015 está lleno de oportunidades, en "un momento sin
precedentes y complejo", que tiene su próxima cita destacada en la
Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP21), que se
celebrará en París entre los próximos 30 de noviembre y 11 de
diciembre.
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