PARÍS.- El índice de desempleo descendió 0,4 por ciento en noviembre en
Francia, donde la elevada desocupación es una de las principales
preocupaciones para las personas. La cifra de parados se ubicó en 3,57 millones, lo cual representa un
alza de 2,5 por ciento en la comparación interanual, notificó hoy el
Ministerio de Trabajo.
El total se ubicaría en 5,44 millones si se tuvieran en cuenta a quienes tenían una actividad a tiempo parcial y estaban también en busca de trabajo, precisó.
Acorde con los datos divulgados, desde la elección en mayo de 2012 del presidente francés, François Hollande, el número de desempleados aumentó en 703.100.
Analistas señalan que algunos de los principales desafíos del Ejecutivo corresponden al área económica, concretamente al apartado laboral, con una tasa de cesantía en torno el 10 por ciento, y al del crecimiento, aún insuficiente para lograr una recuperación sostenida del empleo.
El Consejo económico, social y medioambiental de Francia remarcó que disminuir el desempleo y relanzar un crecimiento sostenible, deben constituir los objetivos centrales de las políticas macroeconómicas.
Hollande condicionó su candidatura a las elecciones presidenciales de 2017 al tema laboral, ya que reiteró que sólo se presentará si se registra una baja creíble de la desocupación, una de sus promesas de campaña electoral de 2012.
El total se ubicaría en 5,44 millones si se tuvieran en cuenta a quienes tenían una actividad a tiempo parcial y estaban también en busca de trabajo, precisó.
Acorde con los datos divulgados, desde la elección en mayo de 2012 del presidente francés, François Hollande, el número de desempleados aumentó en 703.100.
Analistas señalan que algunos de los principales desafíos del Ejecutivo corresponden al área económica, concretamente al apartado laboral, con una tasa de cesantía en torno el 10 por ciento, y al del crecimiento, aún insuficiente para lograr una recuperación sostenida del empleo.
El Consejo económico, social y medioambiental de Francia remarcó que disminuir el desempleo y relanzar un crecimiento sostenible, deben constituir los objetivos centrales de las políticas macroeconómicas.
Hollande condicionó su candidatura a las elecciones presidenciales de 2017 al tema laboral, ya que reiteró que sólo se presentará si se registra una baja creíble de la desocupación, una de sus promesas de campaña electoral de 2012.
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