sábado, 3 de enero de 2015

Papandreu crea un nuevo partido político y divide al electorado griego


ATENAS.- El exprimer ministro griego, Giorgios Papandreu, ha anunciado la creación de un nuevo partido político de tendencia socialdemócrata que podría dividir el voto del principal socio del Gobierno, el Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK por sus siglas en griego).

El nuevo partido se llamará Movimiento por el Cambio. Aunque aún no ha detallado su programa electoral, los analistas no esperan mucho que difiera mucho del que promete el PASOK. La diferencia entre ambos partidos estará en que Papandreu no pretende pactar con el actual partido del Gobierno, Nueva Democracia (ND).
Papandréu lideró Grecia durante la crisis económica de la zona euro. En 2011, perdió su mandato tras una caída espectacular de popularidad por la incapacidad de hacer frente al duro golpe que ha supuesto la crisis económica al país heleno.
Tras su marcha del escenario político, su partido y ND pactaron para llevar a cabo una serie de reformas que trataran de mejorar a largo plazo la delicada situación de la economía griega, la más afectada por la crisis del euro.
Grecia celebrará elecciones generales el próximo 25 de enero. La imposibilidad de llegar a un acuerdo entre las distintas fuerzas del parlamento para elegir un presidente de la República han obligado al primer ministro, Antonis Samaras, a convocar elecciones anticipadas.
Las encuestas sitúan a la Coalición de la Izquierda Radical (Syriza por sus siglas en griego) como la primera fuerza política del país, seguida de cerca por el actual partido del Gobierno, ND. Sin embargo, el PASOK, que había dominado la política griega desde los años 60, podría quedarse fuera del Parlamento según varios analistas.

'Syriza' exigirá una quita de la mayor parte de la deuda griega

ATENAS.- El líder de Syriza, Alexis Tsipras, recalcó este sábado que un Gobierno de Grecia dirigido por su partido negociará con sus socios europeos "sobre una base realista" y exigirá "una quita de la mayor parte de la deuda, porque la deuda objetivamente no puede ser pagada".

En un acto multitudinario de su partido que sirvió de comienzo de la campaña para las elecciones anticipadas del próximo 25 de enero, Tsipras aseguró que el objetivo de Syriza es lograr una quita que haga sostenible la deuda, "con medidas que no provoquen daño a los pueblos europeos, sino con mecanismos europeos".
"Solo (el primer ministro Andonis) Samarás pretende que la deuda es sostenible, todo para no reconocer que su programa fracasó y que es necesario acabar con la austeridad", dijo y añadió que el objetivo de su partido es que "la deuda sea pagada con crecimiento".
Para relanzar la economía, añadió, será necesario un programa de inversiones públicas a nivel europeo.
"Que lo sepan todos. Habrá negociación, habrá acuerdo y el Memorando será pasado no solo en Grecia sino en toda Europa", afirmó el líder, convencido del triunfo de Syriza en las urnas.
Tsipras aseguró que una vez ganadas las elecciones, Syriza aplicará inmediatamente y "pase lo que pase con la negociación (con la troika de acreedores)" el llamado Programa de Salónica, un compendio de medidas de ayuda inmediata a los más pobres, un programa que, dijo, no crea nuevos déficit, sino condiciones para el crecimiento.
El líder izquierdista se mostró seguro de que la "campaña del miedo" de Samarás, quien augura una salida de Grecia del euro si gana Syriza, no surtirá efecto y que la izquierda no solo ganará en Grecia, sino también en España y en Irlanda.
"El 25 de enero (fecha de las elecciones en Grecia) comienza una nueva etapa, y a la victoria de Syriza le seguirá la del pueblo español con Podemos e Izquierda Unida, y el año próximo, la de Irlanda, con el Sinn Fein", auguró Tsipras.
El líder de la oposición griega aseguró que "todo el mundo es consciente que Europa no está en peligro por la izquierda, sino por el ultraliberalismo, las políticas de (la canciller alemana Angela) Merkel".
Mientras tanto, el primer ministro griego, el conservador Andonis Samarás, inició la campaña electoral acusando a Syriza de seguir una política que conduciría el país al abismo.
Samarás aseguró que, si Syriza gana las elecciones del día 25 y aplica sus promesas, "Grecia perderá 43.000 millones de euros de inversiones de los fondos europeos hasta 2020".
Además, advirtió de que, como Syriza no logrará alcanzar un acuerdo con los acreedores, los bancos griegos perderán, a partir de marzo, 15.000 millones de euros de liquidez pues "será interrumpida la prestación de liquidez por el Banco Central Europeo (BCE)".
"Todo eso es verdad y esta verdad tengo que decirla a todos los griegos", destacó el líder de Nueva Democracia en su primer mitin de la campaña, cuando las encuestas señalan a Syriza como claro favorito.

Rajoy y el BCE se suman a la preocupación por el resurgir del populismo / José Hervás *

Mariano Rajoy y el economista jefe del BCE, Peter Praet, se han sumado a los dirigentes europeos sobre los riesgos del populismo. Pero las declaraciones que han dado la vuelta al mundo han sido las del presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, que no ha ocultado su apoyo al todavía primer ministro griego, Antonis Samaras, de quien dijo de cara a unas eventuales elecciones que prefería ver caras conocidas en Grecia que la llegada al poder de fuerzas extremistas, en alusión apenas velada a la izquierda radical griega de Syriza.

Las pa­la­bras de Rajoy en este sen­tido han te­nido lugar en Pontevedra, su pro­vincia natal a donde ha acu­dido con oca­sión de su des­canso na­vi­deño. Tras de­fender su ges­tión al frente del Gobierno como ga­rantía de es­ta­bi­lidad en la reunión con la junta pro­vin­cial del PP de Pontevedra, lo que iba a ser un sa­ludo na­vi­deño se ha con­ver­tido en una im­por­tante in­ter­ven­ción po­lí­tica.

En ella el pre­si­dente del Gobierno ha cri­ti­cado a “los adanes que surgen por todas par­tes; al­gunos que se creen que el mundo, la vida y la his­toria co­mienza con ellos”. A lo que ha aña­dido que “lo que pro­pug­nan, que por otra parte es muy di­fícil de en­tender porque no lo saben ex­plicar y porque no lo tienen muy claro, su­pon­dría un salto hacia atrás cier­ta­mente co­losal en caso de que lle­gasen a asumir algún tipo de res­pon­sa­bi­lidad de Gobierno”.

El eco­no­mista jefe del Banco Central Europeo, Peter Praet, ha ido in­cluso más allá en unas de­cla­ra­ciones al diario fi­nan­ciero alemán Börsen-Zeitung, que ya desde los ti­tu­lares des­ta­caba que el re­surgir del po­pu­lismo es una señal de alarma. Y ad­vierte a los Gobiernos para que den prio­ridad a las de­ci­siones po­lí­ticas di­fí­ciles de adoptar y llevar a cabo las re­formas que según él son tan im­por­tantes llevar a cabo.

Las de­cla­ra­ciones las pu­bli­caba el diario alemán horas des­pués de que se co­no­ciera que Grecia tiene que ce­le­brar elec­ciones por man­dato cons­ti­tu­cional ante la im­po­si­bi­lidad de darse un pre­si­dente de la República y con el par­tido anti aus­te­ridad Syriza como el fa­vo­rito de las mis­mas. Si ga­naran y de­ci­dieran aban­donar la mo­neda única el fu­turo de la Unión Europea vol­vería a po­nerse en cues­tión.

Para el eco­no­mista belga las so­lu­ciones rá­pidas que pro­meten los par­tidos po­pu­listas en al­gunos países son re­cetas desas­tro­sas. Y pre­cisa Praert que el sis­tema de de­va­lua­ción per­ma­nente ya no fun­ciona. Esta ad­ver­tencia es muy im­por­tante en el caso es­pa­ñol, pues los di­ri­gentes de Podemos tam­bién han se­ña­lado la de­va­lua­ción de euro como uno de sus ob­je­tivos para re­solver la cri­sis. En su de­bate con el eco­no­mista Daniel Lacalle en La Sexta no pudo dar su­fi­cientes ar­gu­mentos para man­tener su cri­te­rio, pero no po­demos ol­vidar que es una de sus prio­ri­da­des.

No se trata de uti­lizar una es­tra­tegia del miedo para que los ciu­da­danos no elijan a quienes con­si­deren que van a ac­tuar mejor para re­solver los grandes pro­blemas eco­nó­mi­cos, so­cia­les, la­bo­rales y po­lí­ticos que han pro­vo­cado la con­co­mi­tancia de la crisis eco­nó­mica y la ética. Pero tam­poco se trata de alertar ante los anun­cios de que la crisis tiene una so­lu­ción fá­cil.

Cuando un li­gero error de cálculo ha pro­vo­cado des­via­ciones es­pec­ta­cu­lares en los re­sul­tados de cen­te­na­rias en­ti­dades fi­nan­cieras tanto de Europa como de Estados Unidos re­sulta ne­ce­sario poder con­trastar los efectos de las me­didas que se quieren apli­car.

El Gobernador del Banco de Grecia, Yannis Stournaras, ha va­ti­ci­nado que la lle­gada de Syriza al poder con­du­ciría a una ca­tás­trofe eco­nó­mica, con la sa­lida de Grecia de la zona euro y un caos en el sis­tema ban­ca­rio. Quizás con­viene re­cordar que Stournaras formó parte del Gobierno de Samaras, pero el banco ya ha hecho cuen­tas. Si unimos a ellos las de­cla­ra­ciones del eu­ro­dipu­tado de Podemos, Pablo Echenique, de que “las pri­meras elec­ciones de España son ahora en Grecia” se im­pone se­guir muy de cerca todo lo que su­ceda en la cam­paña y sobre todo los re­sul­tados de las mis­mas.

(*) Periodista en https://www.capitalmadrid.com