FRÁNCFORT.- Muchos responsables del Banco
Central Europeo son escépticos sobre la necesidad de adoptar más
acciones a corto plazo, según conversaciones con cinco de ellos, incluso
si las expectativas de inflación se hunden y algunos inversores esperan
más medidas de alivio cuantitativo.
La reunión de la semana que viene se prevé con poco
contenido, y se espera que el momento decisivo llegue cuando el BCE
difunda sus previsiones iniciales de crecimiento e inflación para 2018
el 10 de marzo.
Pero incluso si las proyecciones se deteriorasen,
algunos de los banqueros centrales dijeron que
el BCE no debería responder inmediatamente.
"Todos esperamos (...) que lo que hemos hecho haya sido
suficiente", dijo un miembro del consejo de Gobierno cuya opinión ha
oscilado entre los que apuestan por más medias y los que son
conciliadores. "Dada la volatilidad de los precios del petróleo, incluso
si la previsión de 2018 está por debajo del objetivo, no tenemos que
actuar".
"El BCE ha hecho su trabajo, ha creado el espacio con
acomodo excepcional. Ahora es momento de que otros hagan su trabajo:
política fiscal, inversores en infraestructuras, reformas
estructurales", dijo el alto cargo, que dirige un banco central
nacional, pidiendo no ser citado.
El presidente del BCE, Mario Draghi, decepcionó a los
mercados con un paquete de medidas menor de lo esperado en diciembre,
dejando a algunos inversores esperando que adopte acciones en marzo como
muy pronto, cuando presente sus perspectivas económicas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario