DAVOS.- Más de 40 jefes de
Estado y de Gobierno han empezado a llegar hoy a la localidad de Davos,
en los Alpes suizos, para participar en la 46 edición del Foro Económico
Mundial, marcado por medidas de seguridad mayores que en años
anteriores ante la amenaza terrorista.
La crisis de los refugiados, las tendencias migratorias y la amenaza
terroristas, por una parte; y la economía mundial, de la otra, son los
ejes principales del extenso programa de los cuatro días de reuniones.
Esta cita anual es considerada única en su género al hacer posible
que durante cuatro días coincidan jefes de Estado, ministros y otras
autoridades de más de cien países con 1.500 magnates y ejecutivos de las
compañías más importantes de 25 sectores e industrias.
Los presidentes de Argentina, Mauricio Macri, de Colombia, Juan
Manuel Santos, de México, Enrique Peña Nieto, y de Perú, Ollanta Humala,
entre otros, asisten a la cita, en la que además participará, por
ejemplo, el ministro brasileño de Hacienda, Nelson Barbosa, o la
directora del FMI, Christine Lagarde.
El Foro de Davos ofrece así una tribuna sin igual tanto para hacer
llegar mensajes políticos a una audiencia mundial, como para que los
gobiernos expongan en reuniones privadas con inversores los atractivos
de sus países.
El inicio de las reuniones, que se prolongarán hasta el próximo día
23, ha sido precedido por la divulgación hoy por parte del Fondo
Monetario Internacional (FMI) de datos claves que confirman que la
economía mundial crecerá menos de los esperado, 3,4 por ciento, en lugar
del 3,6 por ciento previsto anteriormente.
Los pronósticos del FMI apuntan además a que la recesión se
prolongará en Latinoamérica por segundo año consecutivo en 2016, con una
contracción estimada del 0,3 %, debido a la profunda recesión de
Brasil, cuya economía caerá un 3,5 % este año.
Por el contrario, el Fondo revisó al alza las previsiones de
crecimiento para España, hasta un 2,7 % en 2016 y un 2,3 % en 2017, dos y
una décima más, respectivamente, a pesar de una incertidumbre política
que el organismo espera ver "pronto" resuelta.
El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, y los
presidentes del Santander, Ana botín, y el BBVA, Francisco González, son
algunos de los asistentes españoles más destacados en el foro.
Los datos del Fondo coinciden con la que ha hecho China de su propia
economía, al revelar que creció un 6,9 por ciento en 2015, la tasa más
baja de crecimiento en 25 años, una noticia que de inmediato ha enfriado
aún más a los inversores.
La situación de China, la segunda economía del mundo tras la
estadounidense, y su impacto a escala global serán motivo de debates
diarios durante el Foro, donde el presidente del Banco Central Europeo,
Mario Draghi, hará previsiones para la Eurozona.
La evolución el sector energético, la posibilidad de prevenir futuros
shocks económicos, la transformación de las finanzas, los cambios que
sigue imponiendo la revolución tecnológica y la expansión de internet y
las perspectivas de las economías emergentes, serán otros temas que se
propondrán al selecto público del Foro Económico Mundial.
Y es que formar parte del "club" de Davos confiere un prestigio muy
particular, razón por la cual los más altos ejecutivos de bancos, fondos
de inversión y, en general, de las compañías más influyentes son
asiduos asistentes a esta reunión.
El interés periodístico por el Foro no decae a pesar de los 46 años
transcurridos desde que se celebró su primera edición, sino todo lo
contrario, ya que la demanda de acreditaciones es varias veces superior a
las plazas que, por razones logísticas, se limita a 500 periodistas.
Durante los preparativos de este evento, los órganos de seguridad han
partido del principio de que esta edición tiene lugar en un contexto de
amenaza terrorista "mayor" que en el pasado, aunque responsables de la
policía han asegurado que no hay evidencia de una amenaza específica.
El Parlamento suizo aprobó el despliegue de 5.000 efectivos del
Ejército y cientos de policías, que en esta ocasión y como novedad
utilizan chalecos antibala, y el espacio aéreo ha sido restringido en 46
kilómetros a la redonda.
Todos los servicios de inteligencia de Suiza están enfocados en Davos
y cuentan con el apoyo de las agencias más importantes del mundo y de
países vecinos, como Francia o Alemania, han indicado las autoridades
policiales, para vigilar la seguridad de una localidad alpina de 11.000
habitantes que estos días aumenta hasta los 14.000.
No hay comentarios:
Publicar un comentario