TOKIO.- El Banco de Japón
(BoJ) anunció hoy la aplicación de un tipo de interés negativo del 0,1
por ciento a las cuentas que las instituciones financieras niponas
mantienen con la entidad para favorecer el crecimiento y sus metas de
inflación.
Se trata del primer movimiento de tipos de interés en Japón desde
octubre de 2010, cuando el BoJ los situó en el bajísimo nivel de entre
el 0 y el 0,1 por ciento de cara a estimular el avance de la tercera
economía mundial.
La entidad ha explicado en un comunicado emitido al término de su
reunión mensual de dos días que la implementación de esta tasa negativa
junto a la aplicación del programa masivo de compra de activos,
establecido en 2013, pretende acelerar su objetivo de que Japón logre
una inflación de en torno al 2 por ciento.
El BoJ ha detallado que este estímulo adicional ha sido adoptado por
la junta de política monetaria por cinco votos a cuatro, y que el banco
central nipón "ampliará los recortes de los tipos de interés en
territorio negativo si se considera necesario".
La decisión del órgano emisor coincide con una revisión a la baja de
sus pronósticos sobre el IPC en el archipiélago, ya que hoy ha recortado
hasta el 0,8 por ciento la subida de precios que espera para el próximo
ejercicio fiscal, que arranca en Japón el próximo 1 de abril.
El BoJ había previsto en octubre un crecimiento de los precios del 1,5 por ciento para el próximo curso.
Del mismo modo ha retrasado la consecución de su meta del 2 por ciento hasta mediados de 2017.
La aguda caída de los precios del petróleo ha neutralizado los
efectos del programa expansivo que el banco inició en 2013 y ha obligado
a la entidad a aplazar su objetivo de sacar a Japón de casi dos décadas
de tendencia deflacionaria, una meta que inicialmente se había
propuesto alcanzar en 2015.
Nada más conocerse el anuncio, la Bolsa de Tokio respondió con una
fuerte subida de en torno al 3,5 por ciento del selectivo Nikkei.
No hay comentarios:
Publicar un comentario