PARÍS.- El primer ministro
francés, el socialista Manuel Valls, afirmó hoy que llevará "hasta el
final" la polémica reforma laboral presentada por su Gobierno, que ha
suscitado el rechazo de buena parte de la izquierda y de los sindicatos,
que preparan acciones de protesta.
"Quiero convencer, y en primer lugar a los franceses, de que esta
reforma del mercado laboral es útil", subrayó en una entrevista a la
emisora "RTL" Valls, que la justificó por el hecho de que "vivimos con
un paro masivo desde hace 30 años" y que actualmente hay 3,5 millones de
personas sin empleo.
Insistió en que el proyecto de ley que se debe aprobar en Consejo de
Ministros el próximo 9 de marzo antes de que empiece su tramitación
parlamentaria busca "dar más fuerza y más competitividad" al país y no
hace más que "alinearse en los derechos aplicables que existen en otros
países".
En este sentido, explicó que se han buscado "los ejemplos en Alemania, en Italia o en España de lo que funciona".
Recordó que aunque Francia ha resistido mucho mejor a la recesión que
otros países gracias a su sistema de protección social -"la crisis que
hemos vivido no tiene nada que ver con lo que se ha vivido en Estados
Unidos o en España"-, su recuperación es demasiado frágil, con un 1,1 %
de crecimiento en 2015 y un 1,5 % previsto en 2016, lo que "es
insuficiente".
Uno de los aspectos más polémicos del texto que se someterá al
Parlamento desde abril es el establecimiento de causas objetivas de los
despidos económicos, lo que incluye el encadenamiento de varios meses de
descenso de los ingresos o de los encargos de la empresa.
"Lo que queremos demostrar -precisó el primer ministro- es que el
empresario no debe tener miedo para contratar porque en el futuro
tendría miedo para despedir", que "es lo que nos dicen".
Buena parte de los dirigentes del Partido Socialista, empezando por
su primer secretario, Jean-Christophe Cambadelis, han criticado la
propuesta de reforma laboral de la ministra de Trabajo, Myriam El
Khomri, incluidos miembros del propio Gobierno.
Además, esta tarde está convocada una reunión de la casi totalidad de
los sindicatos, a instancias de la Confederación General del Trabajo
(CGT), para preparar "acciones e iniciativas comunes", algo inédito
desde finales de 2013.
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