PEKÍN.- El comercio exterior
chino cayó un 15,7 % en febrero, un mes marcado por el parón en buena
parte de la economía del país debido a los festejos del Año Nuevo lunar,
según datos divulgados hoy por la Administración General de Aduanas.
Las exportaciones chinas cayeron un 20,6 % hasta 821.800 millones de
yuanes (115.000 millones de euros, 126.300 millones de dólares),
mientras que las importaciones bajaron un 8 % hasta los 612.300 millones
de yuanes (85.600 millones de euros, 94.100 millones de dólares).
El superávit comercial chino se redujo el mes pasado un 43,3 % hasta
los 209.500 millones de yuanes (32.200 millones de dólares, 29.300
millones de euros), según los datos de las aduanas.
Esta contracción del excedente comercial de China, líder mundial en
intercambios con el exterior, se explica por la mayor reducción de las
exportaciones que la de las importaciones, que rompe la tendencia de los
últimos meses.
En enero las exportaciones bajaron un 6,6 % y las importaciones, un
14,4 %, para un descenso conjunto de un 9,8 %, por lo que la mayor caída
de los intercambios apunta a un debilitamiento de la demanda mundial de
bienes chinos, agravada por el efecto estacional.
Entre los días 7 y 13 de febrero, el gigante asiático celebró las
vacaciones del Año Nuevo chino, una fiesta que al seguir el calendario
lunar cambia de fecha cada ejercicio y provoca distorsiones en los
indicadores estadísticos de los dos primeros meses del año.
En febrero de 2015, las exportaciones chinas se dispararon un 48,9 %,
mientras que las exportaciones se hundieron un 19,7 %, unas variaciones
extremas atribuidas al Año Nuevo lunar.
En los dos primeros meses de 2016, los intercambios de China con sus
tres principales socios comerciales, la Unión Europea, Estados Unidos y
la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) descendieron un
9,7, un 12,2 y un 14,9 %, respectivamente.
El Gobierno chino se ha propuesto como meta para este año lograr un
crecimiento "firme" de las importaciones y las exportaciones, eludiendo
dar un objetivo concreto después de incumplirlo en los ejercicios
previos.
Para el conjunto de 2015, Pekín se había marcado como objetivo un
alza del 6 % en el comercio exterior, pero el resultado real fue una
caída del 7 %.
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