TOKIO.- El ministro japonés
de Finanzas, Taro Aso, consideró hoy que "la calma ha empezado a
retornar a los mercados financieros" tras las turbulencias registradas a
nivel global durante el arranque de 2016.
Con base en los últimos desarrollos bursátiles y la aparente
estabilización de la divisa nipona, el yen, Aso consideró, en
declaraciones recogidas por la agencia Kyodo, que estos vaivenes parecen
haberse moderado, aunque insistió en que aún es necesario vigilar las
reacciones que registran las plazas financieras.
En cualquier caso, Aso opinó que las agresivas fluctuaciones que se
han vivido en los mercados de divisas y de renta variable en los últimos
compases de 2015 y en el arranque de este año reflejaron una "respuesta
excesiva" por parte de los inversores.
La ralentización china, la inestabilidad en los mercados de materias
primas y las dudas sobre la dirección más idónea para la política
monetaria estadounidense sembraron dudas a nivel global y en algunas
parqués, como Wall Street, depararon el peor arranque de año de la
historia.
El selectivo Nikkei de la Bolsa de Tokio perdió entre principios de
diciembre y mediados de febrero más de un 23 por ciento de su valor,
mientras que el yen, divisa que se considera refugio seguro en tiempos
de incertidumbre, se encareció un 9 por ciento en relación al dólar,
golpeando a los valores exportadores nipones.
Desde mediados de febrero, al compás de una relativa estabilización
de los precios del crudo, el referencial nipón ha mostrado una
recuperación moderada, mientras que el encarecimiento de la moneda
nipona -que se ha abaratado de manera constante durante la última
semana- parece haber tocado techo por el momento.
En todo caso, Aso aseguró hoy que las bases de la economía japonesa
se mantienen "firmes", y puso como ejemplo los datos que arroja el
mercado laboral nipón o las buenas hojas de resultados que prevén la
mayoría de grandes empresas japonesas para el actual ejercicio, que
concluye el próximo 31 de marzo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario