ROMA.- El primer ministro
de Italia, Matteo Renzi, destinó hoy 3.500 millones de euros a la
Investigación y la Cultura, mientras los sindicatos se movilizaban por
el Primero de Mayo para pedir al Gobierno que conceda "más valor al
trabajo".
Con el objetivo de "honrar la fiesta de los trabajadores", Renzi
convocó para este Primero de Mayo al Comité Interministerial para la
Programación Económica (CIPE), encargado de coordinar las acciones
económicas del Ejecutivo en el plano nacional e internacional.
Tras la reunión, que duró alrededor de hora y media, se aprobó el
desembolso de 3.500 millones de euros, de los cuales 2.500 millones
serán invertidos en el sector de la Investigación mientras que mil
millones irán a parar a la Cultura, informó Renzi en Facebook.
"El hecho que el CIPE se haya celebrado hoy es una señal de gran
importancia simbólica: continuamos trabajando para que Italia sea
finalmente desbloqueada", refirió el presidente del Gobierno.
En su comentario en Facebook, Renzi recordó a quienes no tienen
trabajo pero, aunque dijo no resignarse, subrayó que desde que gobierna
"hay 398.000 puestos de trabajo más y 373.000 parados menos", lo que
supone en su opinión que su reforma laboral funciona.
Mientras, los principales sindicatos italianos -Cgil, Cisl y Uil-
eligieron Génova (noroeste) para celebrar la tradicional manifestación
del Primero de Mayo, en la que han exigido al Gobierno que impulse la
economía del país y la saque del estancamiento.
La movilización transcurrió por las principales calles de la capital
ligur, una de las más industrializadas de Italia e importante puerto
Mediterráneo, bajo el lema "Más valor al trabajo: Contratación, empleo y
pensiones".
Los sindicalistas expresaron sus críticas hacia los datos económicos
de Italia y lamentaron el exceso de optimismo del Ejecutivo de Renzi ya
que, según señaló el líder de Uil, Carmelo Barbagallo, "no es verdad que
el país haya repartido".
En la misma línea se mostró la número uno de la Cgil, Susanna
Camusso, quien alertó de la precariedad del trabajo en Italia que, en su
opinión, "no ha iniciado la recuperación porque todavía hay desempleo".
Sus palabras suponen una respuesta al Gobierno, que ha celebrado
datos como el que apunta a la mejora de la tasa de desempleo en el mes
de marzo, cuando se redujo un 1,1 % interanual hasta el 11,4 % y se
situó al nivel de diciembre del 2012.
El presidente de la República, Sergio Mattarella, destacó en un
discurso que el 2015 y el 2016 son años de "crecimiento moderado" pero,
al igual que los sindicalistas, llamó a "no conformarse con cifras aún
limitadas en comparación con la dimensión del problema".
Por otro lado, entre las principales reclamaciones de los
representantes de los asalariados italianos estuvo la de mejorar la
seguridad en los puestos de trabajo.
Y es que el Instituto Nacional para la Aseguración contra los
Accidentes en el Trabajo (INAIL, por sus siglas en italiano) ha alertado
de que los accidentes laborales aumentaron en un 16 % en 2015 en
comparación con el año anterior.
Las manifestaciones se repartieron por todo el país y una de las más
movidas fue la de Turín (norte), donde se vivieron algunos momentos de
tensión entre una manifestación alternativa y los antidisturbios.
En la capital, Roma, se celebró el tradicional concierto del Primero
de Mayo que, desde 1990, reúne en la plaza de San Juan de Letrán a miles
de personas para participar en una jornada de música y
reivindicaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario