LONDRES.- El líder del Partido Laborista británico, Jeremy Corbyn, destituyó a uno de sus ministros en la sombra, Hilary Benn,
a quien los medios señalaron como promotor de un “golpe de Estado”
contra él por no renunciar tras fracasar su campaña por la permanencia
del Reino Unido en la Unión Europea.
Corbyn se enfrentará el martes a un
voto de confianza en su partido después de que varios diputados
laboristas pidieran el jueves su dimisión al acusarle de no haber hecho
una buena campaña en el referéndum de ese día, que ganó salir de la UE, y
considerarle incapaz de ganar unas elecciones generales.
Dos diputadas, Margaret Hodge y Ann Coffey, plantearon una moción de confianza al líder laborista,
que deberá considerar el presidente del grupo parlamentario del
partido, John Cryer, y podría ser debatida el lunes. Si acepta la
solicitud, el martes podría celebrarse una votación secreta dentro del
grupo parlamentario.
Según informó esta madrugada la cadena pública BBC, Corbyn destituyó a
Benn de su cargo de ministro de Exteriores en la sombra, una práctica
británica en la que la oposición forma un gabinete alternativo para
examinar a los ministros del gobierno.
El comunicado con la salida forzada de Benn fue divulgado a primera
hora de la madrugada del domingo horas después de que diarios británicos
informaran de el diputado laborista estaba orquestando una renuncia
masiva del equipo de Corbyn si se resistía a renunciar.
La BBC informó de que era probable “un número significativo” de dimisiones del gabinete en la sombra si Corbyn ignora el resultado de la votación del martes.
El líder laborista atribuyó el viernes el voto por el
“brexit” en el referendo del día anterior al descontento con las
políticas de austeridad y reiteró que no dimitirá pese a las presiones de los diputados de su partido.
En un discurso en Londres, Corbyn instó a los laboristas a “unirse
para luchar” contra un Gobierno conservador dividido y a escuchar a una
población “castigada por los recortes”.
El cuestionado dirigente laborista insistió en que no piensa dimitir
y, preguntado sobre si concurriría a otra elección interna si los
diputados la fuerzan, respondió: “Sí, estoy aquí”.
Según las reglas del Partido Laborista, si 50 diputados nominan a un nuevo candidato puede convocarse otro concurso por el liderazgo.
Corbyn, elegido el pasado septiembre con el apoyo arrollador de las
bases pero con escaso apoyo entre los diputados, ha recibido el respaldo
de los principales sindicatos británicos, entre ellos Unite y Unison,
que urgieron al partido a unirse en torno a su líder.
No hay comentarios:
Publicar un comentario