PRETORIA.- Sudáfrica conserva su actual nota crediticia al menos por ahora, tras
la decisión hoy de la agencia estadounidense de calificación Standard
& Poor de no rebajar su grado de inversión.
S & P mantiene la perspectiva negativa de la calificación, citando
preocupaciones sobre el crecimiento económico y advirtió que podría
proponer una disminución a fin de año o en 2017, si las medidas
adoptadas aquí no generan los resultados esperados.
Entre los factores de riesgo, S & P enumeró el débil crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y un presunto aumento de las tensiones políticas que estarían acentuando vulnerabilidades en el perfil de la deuda soberana del país.
Aun así, dijo la agencia, se perciben mejoras en el sector de la energía que podrían reducir algunos de los obstáculos económicos.
También "en el lado fiscal, el gobierno está mostrando una mayor determinación para disminuir el déficit a un ritmo más rápido de lo que esperábamos", observó S & P.
"Estamos, por tanto, afirmando nuestra (calificación) A-3 BBB- para la moneda extranjera y para la moneda local de BBB + / A-2 en Sudáfrica", expresó la consultora financiera.
En síntesis, la "perspectiva sigue siendo negativa, lo que refleja las potenciales consecuencias adversas del bajo crecimiento del PIB", subrayó S & P.
El Tesoro Nacional celebró que la decisión le da a Sudáfrica más tiempo para demostrar la aplicación concreta de las reformas encaminadas al logro de mayores niveles de crecimiento inclusivo y a la colocación de las finanzas públicas en una senda sostenible.
"La calificación demuestra que los sudafricanos se pueden unir, especialmente durante tiempos difíciles, para lograr una misión común", destacó la entidad.
También reconoció que los venideros seis meses serán críticos, por lo que hay una necesidad de intensificar la ejecución del plan de nueve puntos y otras medidas para impulsar la economía nacional.
Los esfuerzos a corto plazo están dirigidos a recuperar la confianza e impulsar la inversión entre los inversores locales e internacionales; el desbloqueo de obstáculos para el crecimiento más rápido del empleo en sectores principales y el adecuado manejo fiscal.
Standard & Poors (S & P) es una de las tres grandes agencias de calificación crediticia junto con Moody Investors Service y Fitch Ratings.
La nota de Moody es ajustada a Baa2 con perspectiva negativa y la de Fitch, BBB- con perspectiva estable.
En general, la calificación de crédito es utilizado para medir la solvencia del país.
Entre los factores de riesgo, S & P enumeró el débil crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y un presunto aumento de las tensiones políticas que estarían acentuando vulnerabilidades en el perfil de la deuda soberana del país.
Aun así, dijo la agencia, se perciben mejoras en el sector de la energía que podrían reducir algunos de los obstáculos económicos.
También "en el lado fiscal, el gobierno está mostrando una mayor determinación para disminuir el déficit a un ritmo más rápido de lo que esperábamos", observó S & P.
"Estamos, por tanto, afirmando nuestra (calificación) A-3 BBB- para la moneda extranjera y para la moneda local de BBB + / A-2 en Sudáfrica", expresó la consultora financiera.
En síntesis, la "perspectiva sigue siendo negativa, lo que refleja las potenciales consecuencias adversas del bajo crecimiento del PIB", subrayó S & P.
El Tesoro Nacional celebró que la decisión le da a Sudáfrica más tiempo para demostrar la aplicación concreta de las reformas encaminadas al logro de mayores niveles de crecimiento inclusivo y a la colocación de las finanzas públicas en una senda sostenible.
"La calificación demuestra que los sudafricanos se pueden unir, especialmente durante tiempos difíciles, para lograr una misión común", destacó la entidad.
También reconoció que los venideros seis meses serán críticos, por lo que hay una necesidad de intensificar la ejecución del plan de nueve puntos y otras medidas para impulsar la economía nacional.
Los esfuerzos a corto plazo están dirigidos a recuperar la confianza e impulsar la inversión entre los inversores locales e internacionales; el desbloqueo de obstáculos para el crecimiento más rápido del empleo en sectores principales y el adecuado manejo fiscal.
Standard & Poors (S & P) es una de las tres grandes agencias de calificación crediticia junto con Moody Investors Service y Fitch Ratings.
La nota de Moody es ajustada a Baa2 con perspectiva negativa y la de Fitch, BBB- con perspectiva estable.
En general, la calificación de crédito es utilizado para medir la solvencia del país.
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