miércoles, 8 de junio de 2016

El BCE comenzó hoy a comprar deuda corporativa con grado de inversión y presiona los precios al entrar en el mercado

FRÁNCFORT.- El Banco Central Europeo (BCE) ha comenzado hoy a comprar deuda corporativa de empresas grandes de la zona del euro, también aseguradoras, con grado de inversión, confirmó un portavoz de la entidad monetaria.

El BCE compra deuda con un vencimiento mínimo de seis meses y máximo de hasta 30 años.
Con esta medida se prevé que caigan los tipos de interés de la deuda corporativa y de este modo se facilitará que los bancos den créditos a las empresas y a los hogares.
Asimismo el BCE quiere que suba la inflación en la zona euro al incrementar el dinero en circulación.
El Banco Central Europeo (BCE) presiona así los precios de la deuda corporativa de la zona del euro al entrar en el mercado para facilitar la financiación de las empresas y para que inviertan.
El BCE compra deuda de empresas, que no sean bancos, con un vencimiento mínimo de seis meses y máximo de hasta 30 años.
Las financieras de las empresas automovilísticas también están incluidas en esta nueva medida de expansión cuantitativa.
Al BCE le vale para comprar con que sólo una de las principales agencias de medición de riesgo otorgue a los títulos de deuda de una empresa una buena calificación crediticia, aunque las otras la consideren bono basura.
La cantidad de deuda que cumple todos los criterios del BCE es de unos 800.000 millones de euros, según cálculos del director de Corporate Credit Research del Commerzbank, Marco Stoeckle.
Asimismo, el BCE quiere al impulsar la inversión y el dinero en circulación que suba la inflación en la zona euro.
La inflación de la zona del euro se situó en mayo en el -0,1 %, muy lejos del objetivo del BCE, que es una tasa algo por debajo del 2 %.
El BCE va a comprar un volumen máximo de un 70 % de los títulos emitidos por un emisor.
Las empresas públicas serán tratadas como en el programa de compra de deuda pública, donde los límites de adquisición por emisor son del 25 % para la deuda soberana y del 33 % para las instituciones públicas.
El mercado ya se ha preparado para tener al BCE como un gran inversor y los precios de la deuda corporativa han subido y las rentabilidades han caído, de hecho ya hay deuda corporativa de empresas europeas por valor de 20.000 millones de euros que tiene rentabilidad negativa, según Fitch.
Antes de que el BCE anunciara esta medida, esta cantidad era de menos de 1.000 millones de euros.
Desde que el BCE anunciara que iba a comprar deuda corporativa, muchas empresas solventes han emitido deuda, un 50 % más que en el mismo periodo del año pasado.
Algunos expertos prevén que este año las empresas van a emitir una cantidad récord de deuda.
Las emisiones de deuda a largo plazo de Telefónica y Engie avanzan de manera significativa, después de que el BCE haya comenzado a comprar, informa Dow Jones.
También se rumorea que el BCE está adquiriendo deuda de la italiana Generali.
Si los bonos corporativos suben sin motivo aparente, probablemente eso indica que el BCE está comprando, según el estratega de ING Jeroen van den Broek, añade Dow Jones.
El mercado del crédito en euros es demasiado ilíquido para que el banco central intervenga sin que cada una de estas compras provoque fuertes fluctuaciones en los precios, concluye Broek.
La cantidad de deuda corporativa en el mercado que cumple todos los criterios del BCE es de unos 800.000 millones de euros, según Commerzbank.
Muchos analistas prevén que el BCE comenzará a comprar deuda corporativa por valor de entre 5.000 y 10.000 millones de euros al mes.
Sin embargo, el director de Corporate Credit Research de Commerzbank, Marco Stoeckle, es más pesimista y calcula que el BCE comenzará a comprar un volumen mensual de deuda corporativa de entre 3.000 y 5.000 millones de euros y que podría aumentarlo posteriormente.
En caso de que el BCE entre y pise muy fuerte, podría secar el mercado rápidamente, considera el economista jefe para Alemania del banco suizo Julius Bär, David Kohl.
Algunos expertos consideran que el programa de compra de deuda corporativa del BCE reduce a corto plazo los costes de refinanciación de las empresas, pero a medio y largo plazo puede generar vaivenes en los precios.
Por países, las empresas de Francia, Alemania, Italia, España y Holanda son los mayores emisores de deuda corporativa.
El sector de empresas proveedoras de energía, como por ejemplo la francesa EDF, la alemana RWE y la española Gas Natural, es el que más volumen de deuda tiene emitido, unos 160.000 millones de euros.
Le siguen el sector de bienes industriales, donde están empresas como Siemens o Alstom, y el sector automovilístico, en ambos casos con volumen de unos 50.000 millones de euros respectivamente, según cifras de Commerzbank.
Analistas de Deutsche Bank Research consideran que "el BCE ha maniobrado, probablemente con muy buenas intenciones, a una posición donde las expectativas del mercado tienen cada más influencia en su política monetaria".

No hay comentarios:

Publicar un comentario