SÍDNEY.- El jefe del Gobierno australiano, Malcolm Turnbull, ha anunciado este
domingo la victoria de la gobernante coalición Liberal-Nacional, que él
encabeza, en las elecciones generales celebradas el pasado 2 de julio.
"Hoy es un gran día. Han sido elecciones muy tensas, con temas muy
candentes que se han resuelto, finalmente, de manera pacífica. Y eso es
un motivo de celebración", ha señalado en una rueda de prensa.
Con el 79,7% del escrutinio, la coalición gana los comicios
legislativos australianos al conseguir hasta el momento 74 escaños en la
Cámara de Representantes (el 42,1% de los votos) y confía en poder
obtener otros dos asientos que le permitan gobernar en solitario.
Su principal rival, el opositor Partido Laborista Australiano (ALP en
inglés), llega a 66 escaños (el 35,1% de los apoyos), seguido por la
formación Los Verdes, que obtiene un escaño (9,8%).
De quedarse corto, Turnbull ya trabaja en formar alianzas con los
grupos minoritarios e independientes para permanecer en el Ejecutivo.
Dos diputados independientes con participación en el próximo Congreso ya
han señalado en público su apoyo a la coalición gobernante.
Horas antes, el líder del principal partido opositor, el laborista
Bill Shorten, ha reconocido su derrota y ha felicitado en conversación
telefónica al actual mandatario de Australia.
"Está claro que Turnbull y su coalición formará gobierno. He hablado
con Turnbull para felicitarle y desearle lo mejor", ha señalado Shorten
en una rueda de prensa desde Melbourne.
El líder laborista ha expresado su voluntad de trabajar "en los
puntos en común" junto al próximo gobierno por el bien de los
australianos.
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