martes, 2 de agosto de 2016

Donald Trump, una opción antisistema / José Javaloyes *

La extremosidad de las aseveraciones del candidato republicano en la prácticamente comenzada campaña electoral norteamericana, desbordan por los cuatro costados los rangos de anormalidad habidos históricamente, hasta la presente ocasión, conforme la memoria común de los observadores. 

Decir como ha dicho Donald Trump que ”El 8 de Noviembre deberemos estar muy atentos porque las elecciones van a estar amañadas”, es mucho más que un exabrupto. Se trata de algo que no tiene cabida, ni por el fondo ni por la forma, en lo que respecta al sentido de la ocasión, periódicamente capital, dentro el sistema de gobierno por el que se rige la primera potencia del mundo.

El personaje no se para en barras. De ahí que a estas horas su condición de magnate (“Personaje muy ilustrado y principal”, según la RAE), ruede ya revuelto, por razón de homofonía, de sonido paredaño, con su antónimo mangante, equivalente a desaprensivo y amigo de lo ajeno. Graves han sido las necedades proferidas por el personaje, como la idea de impedir con un muro de costa a costa la entrada de inmigrantes en Estados Unidos; blasonar de sintonías con el presidente Putin y reconocer la usurpación rusa de Crimea; o tildar de “demonio” a su adversaria en la carrera a la Casa Blanca.

Son tantos los hitos verbales en los que ha incurrido para su descalificación que pueda darse pábulo, otorgándole cualificada probabilidad de que ya, a tan tempranas fechas se le atribuya una derrota por ocho puntos…, que podrían llegar a algunos más. De aquí al 8 de Noviembre, su ontológica y antológica condición de supuesto necio antisistema podría hacerlo muy probable.

Podría, quizás, haber otra cosa: su revelada insistencia en hacer negocios con la Tercera Roma, y la propia gravitación económica de cofrades suyos en el mismo empeño, podría generar la hipótesis de que Donald Trump, en verdad, no estaría haciendo campaña política para llegar a la Casa Blanca, sino para que, de una vez, se le abran, para sus negocios, las puertas del Kremlin putiniano.


(*) Periodista español

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