SANTIAGO.- Las propuestas del
Gobierno para mejorar el sistema de pensiones tendrá un costo para el
Fisco de 1.500 millones de dólares, anunció hoy el ministro de Hacienda
de Chile, Rodrigo Valdés, en una conferencia de prensa.
"Desde el punto de vista fiscal, porque el Estado es un empleador muy
importante del país, el costo fiscal en régimen equivale al 0,5 % del
Producto Interior Bruto (PIB), en torno a los 1.500 millones de
dólares", afirmó Valdés.
Lo anterior, respecto a los anuncios hechos el martes por la
presidenta Michelle Bachelet de aumentar en cinco puntos porcentuales,
hasta el 15 %, la tasa de cotización de los trabajadores, con cargo al
empleador y en un plazo máximo de 10 años.
"Dicho cálculo incluye un aumento del tope imponible de 50 % que es
parte de los ajustes paramétricos que uno debe considerar en estas
conversaciones", aseguró el jefe de las finanzas del país austral.
Si bien Valdés no reveló plazos para los cambios propuestos, enfatizó
en que el aumento de la cotización será "gradual", pero
"significativo", teniendo en cuenta las consideraciones al mercado
laboral y la restricción fiscal, indicó.
La jefa de Estado señaló en cadena nacional que se creará un pilar de
ahorro colectivo solidario, que permitirá aumentar las actuales
pensiones y lograr más equidad en las pensiones futuras de los actuales
trabajadores que cotizan.
Un segundo punto tiene que ver con "mejores regulaciones" para la
industria que administra actualmente los fondos de pensiones, las AFP,
además de la implementación de una AFP del Estado.
Asimismo, Valdés reiteró las medidas anunciadas por Bachelet para
terminar con la "inequidad de género" en las pensiones, abarcar los
desafíos demográficos, regular sobre los grupos que no cotizan y
eliminar las distorsiones que existen dentro del sistema.
"Haremos un sistema más solidario y verdaderamente tripartito", aseveró el ministro.
Respecto del cobro de comisiones, especialmente en los períodos de
rentabilidades negativas como ha ocurrido en los últimos meses, Valdés
dijo que "se necesita alinear los incentivos de los que administran los
fondos y sus clientes cotizantes".
"Choca bastante que si los retornos son bajos o negativos, haya
ganancias sustanciales para la industria. Tienen que estar esas cosas
más alineadas", expresó.
El ministro además hizo hincapié en la idea de que los ciudadanos
puedan elegir a los representantes de la administración de las AFP y
participar de "políticas de inversión, elección de directores", entre
otros temas.
En 1981 la dictadura de Pinochet impuso el sistema de AFP a los
chilenos, pero mantuvo el antiguo sistema de reparto para las Fuerzas
Armadas, Carabineros y otras instituciones afines, que disfrutan de
altas pensiones, una situación que en la actualidad ha originado la
indignación de los chilenos que han salido a las calles a protestar.
Los cotizantes del sistema privado cobran pensiones equivalentes
entre un tercio y un 50 % de los ingresos que recibían durante su vida
laboral lo que se traduce en que miles de cotizantes reciban pensiones
de apenas 120 mil pesos mensuales (unos 185 dólares).
La Coordinadora "No+AFP" convocó para hoy a una serie de protestas
frente a las sedes de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP)
en Santiago y por la noche a un gran "caceloreo" en las principales
calles de la capital chilena.
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