BERLÍN.- La crisis financiera
ha frenado el proceso de globalización, según un estudio encargado por
la Fundación Bertelsmann y realizado por el instituto Prognos AG que
incluye a 42 países.
El estudio señala que entre 1990 -cuando empezó hacerse
periódicamente el llamado reporte de globalización- y 2007 el proceso de
apertura de fronteras y desmantelamiento de aranceles había ido siempre
en aumento.
Sin embargo, a partir de 2007 -y en parte como consecuencia de la
crisis financiera de 2008- este proceso no sólo se ralentizó, sino
incluso que ha sufrió reveses.
El índice de globalización utilizado por Prognos AG, derivado del de
la Escuela Técnica Superior (ETH) de Zúrich, subió entre 1990 y 2007 de
46,4 puntos a 65,1 puntos.
En cambio, a partir de 2007 el índice empezó a bajar y en 2011 se
estancó. En 2014, el índice promedio para los 42 países estudiados era
de 62,6 puntos.
Con los retrocesos entre 2007 y 2011, y el estancamiento posterior,
según el estudio, los beneficios de la globalización se hacen menores.
En el estudio anterior, que abarcaba el periodo entre 1990 y 2011, se
calculaba que la globalización había tenido como efecto un ascenso
promedio de 610 euros en el ingreso por habitante en los países
estudiados.
Si se toma, en cambio, el periodo completo entre 1990 y 2014, el
aumento del ingreso por habitante promedio es sólo de 580 euros.
El estudio recuerda que el proceso de globalización durante los 24
años estudiados ha traído consigo un aumento del PIB de los países
estudiados de 970.000 millones de euros por año y advierte de que el
proteccionismo no es una respuesta adecuada a la crisis financiera.
"El proteccionismo no es una respuesta convincente a la crisis
financiera. Necesitamos nuevos impulsos al crecimiento y una mayor
integración internacional para aumentar el bienestar de los países
industrializados, los países umbral y los países en vía de desarrollo",
dijo el presidente de la Fundación Bertelsmann, Aart de Geus, sobre los
resultados del estudio.
Los países industrializados son los que más beneficiados se han visto
por el proceso de globalización, con Japón en la cabeza que ha
aumentado su ingreso anual por habitante en 1.470 euros al año.
El beneficio para los llamados países umbral, en cambio, ha sido
menor. Brasil ha aumentado su ingreso por habitante en 120 euros al año
mientras que la India sólo ha logrado un ascenso de 20 euros.
Según el estudio, eso se debe tanto a restricciones comerciales como a factores macroeconómicos.
"Cuanto más bajo sea el PIB al comienzo, menor es el crecimiento absoluto", explicó el director del estudio, Thiess Petersen.
Además, según Petersen, cuanto más tarde abra sus puertas un país a
la globalización, más corto es el tiempo para sacar beneficio de ésta.
Para relanzar el proceso de globalización, el estudio recomienda una
mayor integración de los países umbral y de las naciones en desarrollo
al mercado mundial.
Para ello, según el estudio, se requiere que los países
industrializados abran sus mercados a productos de países menos
desarrollados mediante una reducción de sus aranceles agrarios.
Además, se recomienda que se ofrezca a los países menos desarrollados
posibilidades de financiación para mejorar su infraestructura y
emprender proyectos de formación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario