NUEVA YORK.- Al igual que el resto de las bolsas mundiales más importantes, Wall Street cerró otra semana con pérdidas, sin levantar la cabeza desde el comienzo del año, impactado por los precios del crudo y señales de incertidumbre.
En el caso de Nueva York, la semana terminó este viernes con una
caída del 1,29 % en el Dow Jones de Industriales, el principal
indicador, pero fue mayor el descenso que tuvo el mercado Nasdaq, cuyo
índice compuesto perdió hoy un 3,25 %.
Ha sido otra semana mala para Wall Street, la primera de febrero,
después de un mes en el que los mercados bursátiles de Nueva York
tuvieron uno de los peores comienzos del año de los últimos años,
principalmente por culpa de la caída de los precios del crudo.
En cinco días, el Dow Jones retrocedió un 1,6 %, mientras que el
selectivo S&P 500, el indicador preferido por muchos operadores,
bajó un 3,1 % y el índice compuesto del Nasdaq acumuló una caída del 5,4
%, principalmente por el descenso de hoy.
La sesión de hoy estuvo dominada por la reacción a unos datos sobre
el empleo dados a conocer este viernes que recibieron distintas
interpretaciones en Wall Street, aunque al final se impuso el pesimismo.
Las autoridades estadounidenses informaron hoy de que la tasa de
desempleo llegó en enero al 4,9 %, y en ese mes se crearon 151.000
puestos de trabajo, por debajo de los 190.000 que estaban esperando los
analistas.
Ese generó pérdidas en Wall Street y agudizó las que estaba
registrando Europa, principalmente porque surge de la información la
idea de que la Reserva Federal (Fed) puede llegar a acelerar decisiones
en cuanto a un aumento en las tasas de interés.
Pero un informe del Bank of America-Merrill Lynch indicó que este
dato de empleo puede haber recibido el efecto del mal tiempo que afectó
al país en enero, especialmente en la costa este, aunque destacó el
retroceso en sectores como la construcción.
"El mercado de trabajo todavía está creciendo por encima de la
tendencia y hay señales de que estamos en un nivel de pleno empleo",
dice el informe, y sostiene que, a partir de esta tendencia, lo más
probable es que haya un incremento de las tasas en junio próximo.
Otros analistas, en cambio, creen que esa decisión puede adelantarse
hasta el 15 y 16 de marzo próximo, en la próxima reunión del Comité del
Mercado Abierto de la Fed, aunque tampoco hay pistas firmes acerca de
esa posibilidad.
Al igual que en Wall Street, las pérdidas de los últimos días
afectaron a Europa. El Dax 30 de Fráncfort tuvo un retroceso semanal del
5,22 %, el CAC-40 de París un 4,90 %, el FTSE 100 de Londres el 3,87 % y
el IBEX 35 de Madrid un 3,59 %.
En Asia, en cambio, se acumularon resultados desiguales: la Bolsa de
Shanghái tuvo un avance semanal del 0,96 % y la de Hong Kong perdió un 2
%, afectadas por el descenso en los precios del petróleo y los malos
datos sobre la industria de China.
Algunos analistas están planteando la idea de que el mercado "está
haciendo un error fundamental", como señaló hoy a la cadena CNBC David
Kelly, de la firma JP Morgan Funds, si persiste en ligar la evolución de
las acciones a la caída del precio del crudo.
"Es un momento irracional", agregó Kelly, quien destacó que el país
está cerca del empleo pleno y, en cambio, como no se están creando
tantos puestos de trabajo como antes se ve como una señal de
desaceleración en la economía.
Un informe del grupo Citigroup conocido este viernes refuerza esa
idea pesimista que se mantiene en los mercados bursátiles mundiales.
"El mundo parece estar atrapado en una espiral de muerte", sostiene el estratega de ese grupo financiero Johathan Stubbs.
Y esa espiral incluye un dólar fortalecido, el descenso de los
precios del crudo y otras materias primas, reducción de los intercambios
comerciales, debilidad en los mercados emergentes y del crecimiento
mundial, "y repitiéndose, hasta el infinito".