viernes, 15 de abril de 2016

Las Bolsas desmienten al FMI / Primo González *

Hacía más de un mes (el 11 de marzo) que el Ibex 35 no experimentaba una subida en una sola jornada superior al 3%. Este año es la cuarta sesión en la que sube con tanto ímpetu el índice bursátil español más representativo de la renta variable. El año está siendo muy volátil en los mercados y las subidas y bajadas se prodigan con cierta frecuencia. Tras el fuerte rebote de este miércoles (cuarta subida diaria consecutiva), el Ibex ha reducido sus pérdidas acumuladas en lo que va de año a un 7,5%. Por lo tanto, el año bursátil sigue bajo mínimos, no encuentra suficientes motivos alcistas, sobre todo porque los bancos viven bajo el duro imperio de los tipos cero o negativos, un entorno en el que resulta bastante difícil ganar dinero.

La reacción de las Bolsa ha venido de la mano de dos cuestiones principales, según los analistas del mercado. De un lado, la recuperación de los precios de las materias oprimas y en particular del petróleo durante las últimas semanas. El precio del crudo está en máximos anuales, lo que no es mucho decir dado que este año partía de niveles de precio muy bajos. La segunda motivación alcista de las Bolsa ha sido el anuncio de unas potentes cifras de exportación en China, muy por encima de las previsiones que se manejaban, lo que ha desmentido en parte las argumentaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) que esta misma semana daba pocas opciones al dinamismo de la economía global precisamente a causa de la débil expansión de la economía china.

La positiva reacción china, que estaría anticipando un nivel de actividad industrial mayor del que se contemplaba, puede tener efectos positivos en cadena, ya que el crecimiento de sus exportaciones puede dar fuerza a los precios de las materias primas, dado que este país es uno de los mayores demandantes de estos productos básicos. En cuanto al precio del petróleo, ya por encima de los 40 dólares, sus expectativas más positivas se han producido como consecuencia de la inminente reunión que van a celebrar en los próximos días algunos de los principales exportadores de crudo, en especial Arabia Saudí y Rusia. Estas dos potencias del petróleo pueden haber llegado a un acuerdo de limitación de la producción o de descenso de la misma para evitar la guerra que vienen desempeñando en los mercados mundiales de materias primas.

La presencia reforzada de Irán, una vez levantadas las sanciones, puede restar importancia a este acuerdo de limitación productiva ya que Irán puede añadir bastante crudo al mercado, pero de momento ha tenido un impacto sobre los precios que anticiparía una contención de la oferta mundial de crudo. La agresiva política petrolera de Estados Unidos, mediante sus nuevas fuentes de producción de crudo no convencional, parece haber perdido fuerza en los últimos meses y ello ha vuelto a poner sobre el tapete la cuestión del grado de dependencia petrolera de este país frente al exterior, con el inevitable corolario de un nuevo equilibrio de precios. Estados Unidos puede además aumentar su demanda de crudo en los mercados por efecto de su crecimiento económico, ya que se mantiene como una de las economías más dinámicas del mundo.

Todos estos factores han sembrado una cierta psicosis de recuperación en algunas de las economías, en particular las emergentes, que habían caído con fuerza en los últimos meses, lastrando el crecimiento económico mundial. El asunto dista mucho de los mensajes pesimistas que estos días ha distribuido desde su sede el Fondo Monetario Internacional. Pero las Bolsas creen tener motivos para ver las cosas de otro modo.


(*) Periodista y economista español


http://www.republica.com/retablos-financieros/2016/04/13/las-bolsas-desmienten-al-fmi/