LONDRES.- Boris Johnson, líder del bando favorable al 'Brexit' en Reino Unido, ha
afirmado este domingo que la Unión Europea (UE) se comporta como Hitler al
tratar de crear un supraestado, una declaración polémica que ha sido
tachada de "acto desesperado" por los partidarios de la permanencia en
la UE.
En una entrevista publicada en el dominical 'Sunday Telegraph', el
exalcalde conservador de Londres asegura que la historia de Europa ha
estado marcada desde hace 2.000 años por repetidos intentos de englobar
al continente bajo un único gobierno, a imitación del Imperio Romano.
"Napoleón, Hitler, varias personas intentaron hacerlo y terminó de forma
trágica. La Unión Europea es otro intento [de hacer lo mismo] con
distintos métodos", ha declarado a menos de seis semanas del referéndum
sobre la permanencia de Reino Unido en la UE.
"Pero fundamentalmente,
(...) el eterno problema es que no existe lealtad a la idea de Europa.
No hay una sola autoridad a la que todo el mundo respete o comprenda.
Esto está provocando un enorme vacío democrático", ha añadido Johnson,
uno de los líderes del Partido Conservador del primer ministro David
Cameron, que aboga por la permanencia.
Estas declaraciones han suscitado la indignación de responsables y
diputados del opositor Partido Laborista, que las entienden como un
intento "desesperado" de llevar a los británicos a su campo.
"Boris ha
vuelto a tocar fondo comparando la UE con Hitler", ha escrito en Twitter
la diputada laborista Angela Rayner. Para Hilary Benn, portavoz para
las cuestiones de política exterior de la formación laborista, "quienes
militan a favor de una salida de la UE han perdido el argumento
económico y ahora pierden el sentido moral". Benn ha calificado la
comparación hecha por Boris Johnson de "ofensiva y desesperada".
Otra
figura del laborismo, Yvette Cooper, también opuesta al 'Brexit',
considera que el exalcalde londinense hace "juego sucio".
"Cuanto más
esgrime este tipo de declaraciones histéricas, más demuestra su
vergonzosa falta de juicio, su afán de hacer la política cínica y
divisoria y el vacío de sus argumentos", ha manifestado.
Aunque la Comisión Europea ha preferido no pronunciarse al respecto,
el ministro finlandés de Finanzas, Alexander Stubb, ha considerado la
comparación "escandalosa": "¿Qué está pasando en la cuna del sentido
común y la civilización?", ha escrito en Twitter.
No se trata de la primera declaración controvertida de Boris Johnson.
El mes pasado, fue acusado de racismo al atribuir al presidente
estadounidense, Barack Obama, una vertiente antibritánica por sus
orígenes "en parte kenianos".
Se trata, en todo caso, de excesos que contribuyen a su popularidad.
Este domingo ha recibido el apoyo de Nigel Farage, el líder del partido
euroescéptico y antiinmigración UKIP, que ha dicho al 'Mail on Sunday'
que lo apoyaría como sucesor de David Cameron como primer ministro. El
exministro conservador de Trabajo Iain Duncan Smith, asimismo partidario
de la salida de la UE, también se ha alineado con Johnson.
Queda por ver si este tipo de declaraciones tienen algún efecto sobre
el electorado, en un momento en que ambos bandos aparecen igualados en
las encuestas, con un 50% de intención de voto cada uno, según la web
del instituto What UK thinks, que hace la media de los seis últimos
sondeos de opinión.
Para el editorialista de 'The Guardian' Michael White, estas
declaraciones sitúan a Boris Johnson en "la misma" categoría que Donald
Trump, "otro timo intelectual de la élite metropolitana, actualmente muy
ocupada en tratar de engañar a los pobres" para sacar un rédito
electoral.
Pese a ello, un reciente sondeo realizado por 'The Sunday
Mirror' y 'The Independent' señala que el 45% de los encuestados confian
más en Boris Johnson que en David Cameron en lo relativo a las
cuestiones europeas.