GINEBRA.- El fundador del foro de
Davos, Klaus Schwab, en plena forma a sus 78 años, es categórico y
asegura que la globalización, de la que siempre ha sido un gran
defensor, se ha convertido en un chivo expiatorio de los problemas del
mundo.
La llegada al poder de Donald Trump o el Brexit
"no sólo representan la hostilidad contra la globalización", dijo en la sede en Ginebra del Foro Económico Mundial
(WEF, por sus siglas en inglés), un imponente edificio a orillas de
lago Leman.
Schwab reconoce que el mundo está viviendo
cambios muy rápidos que han desestabilizado a las poblaciones y provocan
"cierta ansiedad". "La gente busca una identidad en este mundo nuevo y
la globalización es un chivo expiatorio muy fácil", asegura.
Según
el fundador del WEF, que desde 1971 reúne cada año en el foro de Davos a
líderes políticos y económicos de todo el mundo, los cambios a nivel
global, en particular provocados por las nuevas tecnologías, han
provocado una "crisis emocional" que no sólo puede explicarse por la
globalización.
Para Schwab, doctor en economía, para
hacer frente a esta situación el mundo "sólo" necesita líderes que sean
"receptivos" y "responsables".
Un líder así "escucha a la
gente que forma parte de su equipo y toma las decisiones necesarias
para resolver los problemas". Según Schwab, debe además buscar las
raíces del problema, es decir, "por qué la gente está enfadada y no está
satisfecha".
Para lograrlo se necesita "la valentía de
actuar", añadió, recordando que el lema del foro de Davos este año es un
llamamiento para un liderazgo "receptivo y responsable".
Preguntado
sobre el retorno del proteccionismo en muchos países del planeta,
Schwab augura que a largo plazo llevará a un "mundo muy frágil (...) con
el retorno de las fronteras y todos los inconvenientes que esto implica
para los negocios y para la gente".
El
fundador del WEF también dijo estar preocupado por el hecho de que los
países se están volviendo "cada vez más egoístas" bajo la presión del
electorado. "Se pide a los líderes que trabajen a favor de los intereses
nacionales, en detrimento de la cooperación global", lamentó.
"En
un mundo que se está desintegrando y que se polariza, se necesita un
instrumento de diálogo" como el foro de Davos, que reúne a responsables
políticos, económicos y sociales, reivindicó Schwab.
"Los
grandes problemas del mundo no los pueden resolver simplemente los
responsables políticos o económicos, hace falta una cooperación entre
todas las partes", dijo, abogando por la integración del mundo de los
negocios, de la sociedad civil y de los mejores expertos.
La
edición 2017 del foro, la semana próxima (17-20 de enero), estará
marcada por la presencia por primera vez de un presidente chino, Xi
Jinping, a la cabeza de una importante delegación del gigante asiático.
También
habrá representantes de la futura Administración del presidente electo
de EEUU, Donald Trump, y estarán presentes los todavía vicepresidente,
Joseph Biden, y secretario de Estado, John Kerry.
No hay comentarios:
Publicar un comentario