FRÁNCFORT.- Los
opositores al programa de inyección de liquidez del Banco Central
Europeo tomaron la palabra en la última reunión del BCE, en la que los
miembros del consejo prorrogaron las compras de bonos a pesar de la
mejora de las condiciones económicas.
La inflación en la zona euro está repuntando
debido en gran medida a la estabilización de los precios del petróleo.
Esto está respaldando los argumentos esgrimidos por Alemania para
reducir el agresivo plan de estímulo monetario del BCE por un volumen
total de 2,3 billones de euros (2,46 billones de dólares).
En una rara señal de disidencia abierta, las
actas de la reunión del 8 de diciembre del Consejo de Gobierno del BCE
mostraron que "algunos miembros" se opusieron a ambas propuestas sobre
la mesa para continuar las compras de bonos más allá de marzo.
"Algunos miembros no pudieron apoyar ninguna
de las dos opciones que se habían propuesto, a la vez que acogieron
favorablemente la reducción del ritmo de compras y otras propuestas",
indicaron las actas.
La junta del BCE había presentado planes para
extender las compras hasta diciembre a 60.000 millones de euros al mes o
hasta septiembre a 80.000 millones de euros. La primera opción fue
finalmente aprobada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario