viernes, 13 de enero de 2017

La ONU pide a los gobiernos hacer más para evitar las muertes de migrantes por la ola de frío

GINEBRA.- Refugiados e inmigrantes están muriendo en Europa como consecuencia de la ola de frío y nieve y los gobiernos deberían hacer más para ayudarles en lugar de rechazarles en las fronteras y someterles a violencia y confiscaciones, ha reclamado este viernes el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR).

"Los niños son particularmente susceptibles de sufrir enfermedades respiratorias en una época como ésta. Se trata de salvar vidas, no de papeleos y de cumplir las disposiciones burocráticas", ha sostenido Sarah Crowe, portavoz del Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) en una comparecencia en Ginebra. "La situación más extrema está ahora en Grecia", ha precisado. 
Por su parte, la portavoz de ACNUR Cecile Pouilly ha indicado que hasta ahora se han contabilizado cinco muertes por el frío y que unas 1.000 personas se encuentran en tiendas de campaña y dormitorios sin calefacción en la isla griega de Samos, por lo que ha reclamado su traslado a alojamientos en mejores condiciones en la península.
En los últimos días, en Chios y Lesbos cientos de inmigrantes y refugiados han sido trasladados a mejores alojamientos en las islas. En Serbia, cerca del 80 por ciento de los 7.300 refugiados, solicitantes de asilo e inmigrantes permanecen en refugios con calefacción pero todavía hay 1.200 personas que duermen al raso en Belgrado. 
Poully ha contado que han aparecido los cuerpos de dos hombres iraquíes y una joven mujer somalí cerca de la frontera de Turquía con Bulgaria y que dos adolescentes somalíes han sido hospitalizados por congelaciones tras pasar cinco días en un bosque. A finales de diciembre, apareció el cuerpo de un paquistaní en la misma zona fronteriza.
La portavoz de ACNUR ha explicado que un joven afgano de 20 años murió tras cruzar el río Evros en la frontera terrestre de Grecia con Turquía en una noche en la que las temperaturas estuvieron por debajo de los diez grados negativos. Además, fue encontrado el cadáver de un joven paquistaní en la zona turca de la frontera con Bulgaria. 
 "Dadas las duras condiciones del invierno, estamos especialmente preocupados por las informaciones que señalan que las autoridades de todos los países de la ruta de los Balcanes continúan intentando echar a los refugiados e inmigrantes de su territorio a países vecinos", ha afirmado Poully.
La portavoz ha asegurado que algunos de los inmigrantes y refugiados han denunciado que la Policía les ha tratado con violencia y que les han llegado a romper o confiscar los teléfonos móviles para impedir que pidieran auxilio. "Algunos incluso han denunciado que les han quitado prendas de ropa para dejarles más expuestos a las duras condiciones de invierno", ha indicado. "Estas prácticas son simplemente inaceptables y deben detenerse", ha subrayado.
Según el portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Joel Millman, los movimientos de inmigrantes a través del Mediterráneo "han comenzado en grandes cifras" en 2017 y en lo que va de año se han contabilizado ya 27 fallecidos. De acuerdo con esta agencia de la ONU, 1.202 personas han llegado hasta el 11 de enero a Europa, de las que 1.159 lo han hecho por mar. De ellas, según la OIM, 1.061 han llegado a Italia.
Por su parte, la Organización Meteorológica Mundial ha advertido de que la ola de frío siberiano que afecta al sureste de Europa ha llevado temperaturas por debajo de los cinco y diez grados negativos en países como Grecia, Italia, Turquía y Rumanía, una ola de frío que ocurre como media cada 35 años.

No hay comentarios:

Publicar un comentario