LA PAZ.- Bolivia reportó un superávit fiscal durante el primer semestre de 2018
gracias a la mejora del precio internacional del petróleo y confirmó sus
proyecciones de crecimiento, según un informe hecho público hoy por el
Banco Central de Bolivia (BCB).
En rueda de prensa, presidente del BCB, Pablo Ramos,
informó de que en el primer semestre del año se ha reportado un "saldo
positivo en la balanza comercial", aunque no detalló las cifras, que en
cierta medida se debió a "precios más altos" de los principales
productos de exportación.
Ramos apuntó que gran parte de lo logros macroeconómicos
del país han radicado en "el carácter expansivo" y "contracíclico" del
modelo económico, en el que la política monetaria "coopera" al resto de
las políticas estatales para lograr las metas de crecimiento.
El presidente del BCB destacó como un logro que se haya mantenido la
estabilidad del tipo de cambio de la moneda boliviana, al considerarla
como uno de los "requisitos de estabilidad económica" y que aseguró "se
va a mantener".
El boliviano se mantiene estable desde 2011, en los 6,96 bolivianos por dólar para la venta y los 6,86 para la compra.
En este contexto, subrayó como un logro que "ningún otro país en
América Latina ha podido alcanzar" el que más del 98 % de los préstamos
bancarios y el 87 % de los ahorros se haya hecho en moneda nacional.
Otra de las medidas destacadas por el presidente fue que la emisión
monetaria que se ha desenvuelto en "niveles adecuados" y destacó la
aplicación de medidas como el encaje legal para evitar que exista falta
de liquidez.
"Se ha mantenido un control muy estricto sobre las principales variables monetarias", aseguró Ramos.
También valoró la "soberanía" en las decisiones económicas, el
fortalecimiento de la moneda nacional, es decir la desdolarización, y la
coordinación de las políticas económicas, entre otras, como
fundamentales para responder escenarios adversos y mantener las tasas de
crecimiento del producto interno bruto (PIB).
Bolivia reportó saldos en contra en su balanza comercial en el periodo
2014 al 2017 y el descenso de sus Reservas Internacionales (RIN) de
15.085 millones de dólares en 2014 a 9.174 millones reportados en agosto
pasado.
El asesor principal de política monetaria
del BCB, Raúl Mendoza, declaró que el descenso de las Reservas
Internacionales y el déficit fiscal son "una consecuencia simple" de la
decisión de preservar los programas de protección social, mantener la
inversión y el dinamismo de la actividad económica.
"Todo ello se ha mantenido de manera exitosa", apuntó Mendoza.
Por lo expuesto, el BCB ha ratificado su proyección el nivel de
crecimiento establecida a comienzos de año, estimada en un 4,7 por
ciento, y bajó de la estimación de la inflación, que calcula será
alrededor del 3,5 por ciento.
La deuda externa
pública de unos 9.713 millones de dólares, equivalente a un 23 % del
PIB, considerada "una deuda baja" por el BCB.
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