miércoles, 31 de octubre de 2018

Los países de la UE acuerdan normas sobre los requisitos de capital para créditos fallidos


BRUSELAS/BERLÍN.- Los embajadores de los Estados miembros de la Unión Europea (UE) acordaron hoy su posición común sobre los requisitos de capital que se exigirán a los bancos para hacer frente a los préstamos fallidos, aquellos que acumulan más de 90 días de impago o se consideran irrecuperables.

La propuesta, planteada por la Comisión Europea en marzo, pretende reducir el riesgo de que los créditos improductivos se acumulen en el futuro y así evitar uno de los principales problemas surgidos durante la crisis económica de 2008, que aún perjudica a las entidades bancarias.
En concreto, fija requisitos para reservar fondos propios suficientes en los bancos cuando créditos nuevos no vayan a poder pagarse.
Cuando un cliente pase más de noventa días sin pagar las cuotas fijadas de un crédito, el banco deberá apartar más capital, pues se asume que el préstamo no se devolverá.
La futura normativa fija las cantidades de dinero que los bancos necesitan reservar para cubrir las pérdidas causadas por créditos que dejan de devolverse.
Si las entidades no cumplen con esos requisitos mínimos de cobertura, se aplicarán deducciones de los fondos propios del banco.
Según lo acordado en el Consejo, los requisitos de cobertura variarán en función de si los créditos improductivos tienen o no una garantía y si el bien o activo entregado por el deudor como respaldo es móvil (vehículos) o no (inmuebles o terrenos).
"Tratar los préstamos fallidos y consolidar las hojas de balance de los bancos es esencial para devolver la confianza en nuestro sistema financiero", declaró el ministro austríaco de Finanzas, Hartwig Löger, cuyo país ostenta la presidencia rotatoria del Consejo de la UE (los países).
A partir de ahora, el Consejo podrá iniciar las negociaciones con el Parlamento Europeo una vez que la Eurocámara también pacte su postura sobre la cuestión.
El acuerdo suaviza los cambios legislativos propuestos en marzo por la Comisión Europea. Aún necesita la aprobación del Parlamento Europeo.
Según la propuesta, los bancos tendrán más tiempo para provisionar dinero que cubra posibles pérdidas por préstamos incobrables.
Los países apoyaron ampliar a tres años, desde los dos años propuestos inicialmente, el tiempo que tienen los bancos para provisionar nuevos préstamos sin garantía y con más riesgos.
También acordaron posponer la aplicación de los nuevos requisitos. Inicialmente, se preveía que fueran aplicables a partir de marzo de 2018, lo que significaba que los bancos habrían tenido hasta marzo de 2020 para cubrir completamente las pérdidas por deudas no garantizadas.
Los gobiernos de la UE acordaron sin embargo que sólo los préstamos concedidos tras la adopción de las nuevas reglas estarán sujetos a los nuevos requisitos, dando de hecho a los bancos más de tres años para cubrir las pérdidas de estos préstamos.
La fecha de entrada en vigor de las nuevas reglas dependerá de cuándo se alcance un acuerdo con los legisladores europeos sobre la propuesta.
Además, los préstamos dudosos garantizados por bienes inmuebles deberán provisionarse completamente en nueve años en lugar de ocho.
En una concesión a países como Alemania que querían normas más estrictas, los bancos tendrán siete años, en lugar de ocho, para tener un colchón que cubra completamente nuevos préstamos fallidos garantizados por bienes muebles.


 La zona euro necesita megabancos para competir

La zona euro necesita unos pocos megabancos que puedan competir en el escenario mundial, y los bancos necesitan un sistema de garantía de depósitos, dijo el miércoles Daniele Nouy, la responsable del consejo de supervisión del Banco Central Europeo.
Presionados por la baja rentabilidad y los activos tóxicos que se remontan a la crisis de deuda del bloque, los bancos de la zona euro han luchado para competir con entidades globales, lo que ha elevado las preocupaciones sobre su preparación para la próxima crisis.
La garantía de depósitos se considera clave para la estabilidad bancaria, pero Alemania se ha resistido a un sistema común. Quiere que los bancos limpien primero sus balances, para garantizar que los contribuyentes alemanes no tengan que pagar la factura por cualquier irresponsabilidad pasada en otros países de la zona euro.
“La pregunta es: ¿cuándo son los riesgos lo suficientemente bajos?”, dijo Nouy en Berlín. “En mi opinión, hemos reducido los riesgos lo suficiente para que comience el Sistema Europeo de Garantía de Depósitos. Ahora es el momento adecuado para prepararlo. Es el momento de considerar cierta solidaridad”.
La baja rentabilidad es uno de los principales riesgos para el sector, dijo Nouy, ​​porque algunos bancos no ganan el coste de su capital, y al crearse actores más grandes e internacionales, la consolidación transfronteriza podría ser una solución.
“Este tipo de fusiones transfronterizas también crearían unos pocos bancos europeos grandes, llamémosles ‘campeones europeos’, que luego podrían competir con éxito en el escenario mundial”, dijo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario