BRASILIA.- Las
presiones de los precios representan una de las principales
preocupaciones para el banco central de Brasil, aun cuando varias
medidas de inflación se ubican en niveles cómodos, de acuerdo con el
acta de la última reunión de política monetaria de la institución.
Si
bien las probabilidades de una inflación más lenta debido a una demanda
débil han aumentado, la economía global sigue siendo desafiante y
existen riesgos asociados con la frustración de las reformas internas,
escribieron los miembros de la junta en el acta publicada en el sitio
web de la institución el martes.
El banco central, liderado por su
presidente, Ilan Goldfajn, votó la semana pasada por unanimidad mantener
la tasa de interés de referencia en un mínimo histórico de 6,50 por
ciento.
"Los
miembros destacaron que los riesgos de incremento para la inflación
siguen siendo significativos y tienen un mayor peso en su balance de
riesgos", escribieron los formuladores de política .
La
declaración del banco tiene un tono más cauteloso, luego de que las
presiones de los precios en la economía más grande de América Latina se
diluyeran durante las últimas semanas.
Analistas encuestados por el
banco central esperan que los precios al consumidor se mantengan dentro o
por debajo del objetivo hasta 2021, a pesar de los posibles factores en
contra, incluida la dificultad para aprobar medidas de ajuste como la
reforma pensional. Esta perspectiva ha provocado cierta especulación de
que los formuladores de política podrían sostener, o incluso recortar,
los costos de endeudamiento el próximo año, en lugar de aumentarlos,
como lo han hecho otros mercados emergentes.
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