BUENOS AIRES.- Argentina
cayó en recesión después de una contracción del crecimiento en el
tercer trimestre en medio de una crisis monetaria, lo que indica que se
avecina más dolor para la segunda economía más grande de América del
Sur.
La
actividad económica cayó un 0,7 por ciento en comparación con el
período de tres meses anterior, marcando la segunda caída consecutiva en
el crecimiento trimestral. Sobre una base anual, Argentina se contrajo
un 3,5 por ciento, según cifras publicadas el martes por la agencia de
estadísticas de la nación. La cifra anual coincidió con las expectativas
de los analistas.
Simultáneamente,
el desempleo bajó de 9,6 por ciento a 9 por ciento en el tercer
trimestre, según cifras del gobierno que también se publicaron el
martes.
El
tercer trimestre refleja en agosto el impacto de la crisis monetaria en
Argentina, al igual que la incertidumbre que dio lugar al acuerdo
revisado con el Fondo Monetario Internacional en septiembre. El gobierno
espera que el PIB se contraiga un 2,4 por ciento este año y 0,5 por
ciento en 2019.
La nueva política monetaria del Banco Central de la
República, que según los analistas exacerba la recesión, inició en
octubre 1 y seguramente impactará la actividad económica del cuarto
trimestre. Las cifras del martes marcan la segunda recesión de Argentina
desde que Mauricio Macri asumió la presidencia en diciembre 2015.
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