LONDRES.- La primera ministra británica, Theresa May, prometió ganar la moción de censura sobre su liderazgo desencadenada por partidarios del Brexit enfurecidos dentro del Partido Conservador el miércoles, afirmando que su expulsión pondría en peligro el divorcio de Reino Unido de la Unión Europea. Y finalmente lo ha conseguido esta tarde: 200 diputados conservadores votaron a favor de la jefa de gobierno y 117 en contra.
Cuando faltan menos de cuatro meses para la fecha prevista de salida
del Reino Unido de la Unión Europea (el 29 de marzo), la quinta economía
más grande del mundo atraviesa una grave crisis política por el proceso
del Brexit, cuyas opciones van desde una posible salida sin acuerdo
hasta la celebración de otro referéndum.
En declaraciones
realizadas en el exterior de su residencia en Downing Street poco más de
una hora después de que se anunciara una moción sobre su liderazgo, May
dijo que lucharía por mantener el cargo “con todo lo que tengo”.
El
cisma en el Partido Conservador sobre la relación de Reino Unido con la
UE contribuyó a la caída de los tres primeros ministros conservadores
anteriores: David Cameron, John Major y Margaret Thatcher.
May,
de 62 años, que es hija de un vicario y votó por permanecer en la UE en
2016, lanzó una seria advertencia a sus detractores pro-Brexit en el
partido, señalando que si la derrocaban, el Brexit tendría que
retrasarse más allá de la fecha límite del 29 de marzo o incluso
anularse.
“No habría un nuevo líder antes del plazo legal del 21
de enero, por lo que con la elección de un nuevo líder se corre el
riesgo de entregar el control de las negociaciones del Brexit a los
diputados de la oposición en el Parlamento”, dijo May.
“Estoy lista para terminar el trabajo”.
“Un
nuevo líder no tendría tiempo para volver a negociar un acuerdo de
salida y lograr la aprobación a través del Parlamento antes del 29 de
marzo, por lo que una de sus primeras medidas tendría que ser extender o
rescindir el Artículo 50, retrasando o incluso deteniendo el Brexit”,
dijo.
May se dirigió a los diputados en una reunión a puerta
cerrada antes de iniciar la votación a las 18:00 GMT en la sala 14 del
Comité de la Cámara de los Comunes.
En una posible señal de que May podría dar
una fecha de dimisión tras el Brexit, su portavoz dijo que la moción no
trata sobre quién liderará el partido en las próximas elecciones, que se
celebrarán en 2022.
May
podría haber sido derrocada si 158 de sus 315 diputados hubiesen votado en su contra,
aunque una revuelta a gran escala también podría dañar seriamente su
liderazgo incluso si superaba la moción, como así ha sido finalmene.
Sin embargo, al menos 174 de sus
315 legisladores habían mostrado su apoyo hacia la primera ministra
públicamente hacia las 14:20 GMT.
El Brexit es la decisión
política y económica más importante de Reino Unido desde la Segunda
Guerra Mundial. El resultado final dará forma a la economía británica,
tendrá consecuencias de largo alcance para la unidad del Reino Unido y
determinará si Londres puede mantener su lugar como uno de los dos
principales centros financieros mundiales.
La libra británica,
que ha perdido 25 centavos frente al dólar estadounidense desde el
referéndum de 2016, sumaba el miércoles 1,2615 frente al dólar
estadounidense.
Desde que se desencadenó formalmente el proceso
del Brexit en marzo de 2017, May ha buscado una manera de mantener a
Reino Unido vinculada con la UE después de la salida.
Sin
embargo, el lunes canceló de manera abrupta un voto parlamentario sobre
el acuerdo para el Brexit firmado con Bruselas ante la perspectiva de
una dura derrota.
Posteriormente se apresuró a contactar con los líderes
europeos en busca de garantías sobre el acuerdo.
Su ministro de
Comercio, Liam Fox, dijo que puede que el Gobierno ni siquiera lo someta
a votación a menos que la UE ofrezca más garantías sobre el llamado
“mecanismo de seguridad”, una medida que busca prevenir los controles
fronterizos en la isla de Irlanda.
La canciller alemana Angela
Merkel dijo que los otros 27 miembros del bloque no cambiarían un
acuerdo que la UE lleva dos años negociando.
Los diputados que
apoyan la salida de la UE en su partido han acusado a May de traicionar
el Brexit en las negociaciones, mientras que los detractores del
divorcio con Europa dicen que ha negociado un acuerdo que es el peor de
todos los mundos: fuera de la UE, pero sin poder opinar sobre las reglas
que debe cumplir.
“El plan de Theresa May supondría la caída del
Gobierno si se llevara a cabo”, dijeron los diputados Jacob Rees-Mogg y
Steve Baker en un comunicado.
“Pero nuestro Partido, con razón,
no lo tolerará. Los conservadores deben responder ahora si desean
acercarse cada vez más a una elección bajo el liderazgo de la señora
May. Por el interés nacional, debe irse”.
Pero algunos ministros
expresaron su apoyo a la líder, y el secretario de Interior Sajid Javid
dijo que una pugna por el liderazgo del país era lo último que
necesitaba Reino Unido.
“Lo último que nuestro país necesita en este momento es una elección por el liderazgo en el Partido Conservador”, dijo Javid.
“La primera ministra tiene todo mi apoyo y es la mejor persona para garantizar que nos vayamos de la UE el 29 de marzo”, dijo.