WASHINGTON.- Estados Unidos aumentó el
lunes la presión contra el mandatario Nicolás Maduro en Venezuela, con
sanciones a la estatal petrolera PDVSA, su principal fuente de ingresos,
y un llamado a los militares venezolanos a aceptar una transferencia
"pacífica" del poder al opositor Juan Guaidó.
La crisis política
en Venezuela, que en una semana de manifestaciones dejó 35 muertos y 850
detenidos según varias ONG, "aterra" al papa Francisco, que este lunes
dijo temer un "derramamiento de sangre".
Las sanciones de Estados Unidos buscan impedir a Maduro
desviar activos de Venezuela hasta que el poder pueda ser transferido a
un gobierno de transición, o un nuevo gobierno elegido según las normas
democráticas, explicó a periodistas el secretario del Tesoro, Steve
Mnuchin.
"Hacemos un llamamiento a nuestros aliados y socios para que
se unan a Estados Unidos en reconocer al presidente interino Guaidó y en
impedir que Maduro pueda acceder a fondos", dijo desde la Casa Blanca.
Al mismo tiempo, Guaidó anunciaba en Caracas que su gobierno estaba asumiendo el control de los activos de Venezuela.
"A
partir de este momento iniciamos la toma del control progresivo y
ordenado de los activos de nuestra República en el exterior, para
impedir que en su etapa de salida (...) el usurpador y su banda busque
'raspar la olla' (agotar)", dijo en un comunicado difundido en redes
sociales.
Guaidó, jefe del Parlamento democráticamente elegido en
2015, se autojuramentó el miércoles luego de que el Legislativo
declarara a Maduro "usurpador" por iniciar el 10 de enero un segundo
mandato que considera ilegítimo por ser resultado de elecciones
"fraudulentas".
En su esfuerzo por forzar
un cambio en Venezuela, sumida en la peor crisis económica de su
historia, Washington apeló directamente a los militares, principal apoyo
de Maduro.
"Pedimos al ejército venezolano y a las fuerzas de
seguridad que acepten la transición pacífica, democrática y
constitucional del poder", dijo el consejero de Seguridad Nacional del
presidente Donald Trump, John Bolton, en la misma rueda de prensa.
"Hasta cierto punto, esto ha comenzado", dijo. "Hemos visto al personal militar y oficial venezolano atender a este llamado".
Bolton
mencionó el caso del agregado militar de Venezuela en Washington,
coronel José Luis Silva, que el fin de semana rompió filas con Maduro,
así como el de la cónsul de primera de Miami, Scarlet Salazar, que dio a
conocer su apoyo a Guaidó en un video difundido este lunes.
Consultado
sobre si Trump consideraría involucrar de alguna manera al ejército
estadounidense en Venezuela, Bolton respondió: "El presidente ha dejado
claro en este asunto que todas las opciones están sobre la mesa".
Bolton no se cuidó de
esconder sus notas cuando compareció ante la prensa para anunciar nuevas
sanciones contra Venezuela. "5.000 soldados en Colombia", se pudo leer
en su libreta.
Consultado sobre el significado de esta
frase, un alto funcionario estadounidense dijo no disponer de
información para acreditar esas cifras.
El secretario
del Tesoro estadounidense enfatizó que las sanciones a PDVSA "ayudarán a
evitar que Maduro desvíe los activos de Venezuela y los conserve para
el pueblo de Venezuela".
"El camino hacia el alivio de las
sanciones para PDVSA es a través de la transferencia expedita de su
control al presidente interino o un gobierno posterior, elegido
democráticamente", afirmó Mnuchin.
Aclaró sin embargo que la
filial de PDVSA en Estados Unidos, Citgo, podrá continuar sus
operaciones, siempre y cuando sus ganancias se depositen en una cuenta
bloqueada en Estados Unidos.
Maduro anunció desde Caracas que emprenderá acciones legales contra la decisión de Estados Unidos de imponer sanciones a PDVSA.
"He dado las
instrucciones precisas al presidente de PDVSA de iniciar las acciones
políticas, legales, ante tribunales estadounidenses y del mundo, para
defender la propiedad y la riqueza de (su filial) Citgo", aseguró
Maduro, en la televisión estatal.
Estados Unidos ha emitido
licencias temporales para garantizar que las refinerías de Estados
Unidos, el Caribe y Europa que dependen del crudo venezolano puedan
seguir comprando petróleo de PDVSA, señaló Mnuchin, aunque dijo que
muchas habían tomado ya medidas para buscar otras fuentes.
"Estados Unidos está responsabilizando a los autores del trágico declive de Venezuela", afirmó.
El
agravamiento de la crisis política en Venezuela ocurre en pleno colapso
económico de la otrora potencia petrolera, con PDVSA en default y en su
nivel más bajo de producción en 30 años, escasez de alimentos y
medicinas y una hiperinflación que el FMI proyecta en 10.000.000% este
año.
Este lunes, el gobierno de Maduro devaluó 34,83% la moneda local
equiparando el tipo de cambio al del "dólar negro", algo que le urgían
los especialistas para enfrentar la grave crisis económica.
El
ministro de Energía de Arabia Saudita, Khalid Al Falih, advirtió por
parte que la crisis venezolana podría romper "el equilibrio del mercado"
petrolero.
Harto de Washington
Harto de Washington
El ministro de Economía y Finanzas de Venezuela está cansado de Washington. Simón
Zerpa miraba CNN en español con disgusto el lunes cuando los
funcionarios de la Casa Blanca dieron a conocer las nuevas sanciones
contra la petrolera estatal Petróleos de Venezuela y el banco central de
la nación. Como era de esperar, Zerpa, sancionado él mismo por EE.UU.
en 2017, apenas pudo contener su ira.
"Lo
que está haciendo el gobierno de EE.UU. es algo nuevo en la historia de
la humanidad", dijo en una entrevista. Sobre los directores que el
líder opositor, Juan Guaidó, está nombrando en Citgo comentó que era muy
extraño lo que estaba haciendo el gobierno de EE.UU. y que PDVSA era el
accionista de Citgo.
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